El histórico Caballero de la Cepa mendocino vuelve a dar batalla entre los vinos

Es el tinto con más historia del país. Fue reeditado y ahora vuelve al mercado con estos precios e imagen.

El histórico Caballero de la Cepa mendocino vuelve a dar batalla entre los vinos

 Se trata de uno de los vinos que marcó el inicio de los varietales en Mendoza y fue precursor de la vitivinicultura argentina, cuando aún muy pocos creían en la calidad contenida en una botella. Ese peso lleva la marca "Caballero de la Cepa", de la emblemática y maipucina Finca Flichman, que acaba de ser relanzado al mercado con un perfil de una gama superior y que entra a competir con una infinidad de posibilidades en su segmento.

La bodega Flichman -hoy propiedad de un grupo inversor portugués- comenzó el año pasado con algunos cambios, como la reapertura de su bodega al turismo, con un recorrido guiado por los orígenes de la región de Barrancas, región donde fue pionera en el desarrollo de la vitivinicultura y la inspiradora historia de la Familia Flichman.

Es que entre 1880 y 1921, aproximadamente el 5% de la población que vivía en la Argentina era de origen ruso. Entre ellos, Sami Flichman -oriundo de Lodz, hoy territorio polaco-, quien desembarcó en 1889 con solo 18 años y el destino lo ligó al mundo del vino.

Ver: Así funciona el primer club del café made in Mendoza

Entre sus filas, Flichman contó con uno de los mejores enólogos de todos los tiempos, como lo fue Don Raúl De La Mota, creador del famoso y ahora reeditado "Caballero de la Cepa", quien entre otros premios ganó el título de "Mejor enólogo argentino del siglo XX".

De La Mota también será recordado como el primero en vinificar un varietal como tal en nuestro país, que en ese entonces elaboró para su amigo Isaac Flichman.

Desde 1998 Finca Flichman pertenece al Grupo Sogrape, prestigiosa compañía vitivinícola de la familia Guedes, líder en Portugal y reconocida figura internacional con bodegas en varios paises como, Chile, Nueva Zelanda, España y Argentina.

A principios de 2021 anunció nuevas incorporaciones a su equipo. Primero con Diego Levy como Gerente General y luego con la llegada del líder en el área de enología de su bodega argentina, Rogelio Rabino. Ambos encararon el proyecto de la renovación del más clásico de los tintos mendocinos, ahora como un bivarietal.

La nueva imagen para el Caballero

En este contexto Flichman anunció el relanzamiento de su blend emblemático, de Malbec y Syrah, que encarna y respalda en cada copa el espíritu de una marca que se dio a conocer como el primer vino fino tinto de Argentina allá por los años 60.

Rogelio Rabino, enólogo actual de la bodega, lo describe como un vino para ser compartido que celebra la amistad y la unión.

Esta etiqueta se renueva, pero su esencia permanece. Se elabora con uvas provenientes del viñedo histórico de Barrancas (Maipú) y tiene una crianza de doce meses en toneles usados. Este blend de Malbec y Syrah se caracteriza por su fluidez, taninos dulces y un medio de boca intensamente frutado con sutiles aromas a eucalipto y árbol en flor. Representa la promesa de calidad, tradición, amistad y familia que la bodega tiene como sello propio hace generaciones.

Ya está disponible en su wine shop con un precio promedio de $5.800 la botella, que en realidad se vende por caja de 6 unidades. Pero el objetivo es que ahora vuelva a las góndolas de vinotecas y supermercados, donde supo estar por décadas y que últimamente, con la transición a la renovación había disminuido su presencia. El clásico está de regreso.