Frutas y verduras que no deberías guardar en la heladera y por qué

Aunque pensemos que es lo mejor, las bajas temperaturas pueden terminar siendo contraproducentes.

Frutas y verduras que no deberías guardar en la heladera y por qué

Por: Mendoza Post

En época de calor, sobre todo, pensamos que todo lo que compramos deber ir a parar a la heladera. Y si bien este electrodoméstico nos "salva" porque ayuda a mantener la calidad de la comida, esta regla no aplica para todos los alimentos.

De hecho, hay ciertas frutas y verduras que no conviene guardar allí, ya que las bajas temperaturas terminan siendo contraproducentes.

La mayoría de estos alimentos son sensibles al frío, por lo que una vez en la heladera vas a notar cambios en su color o textura, incluso en su sabor; esto es señal de que están perdiendo sus propiedades nutricionales.

Lo que no hay que guardar en la heladera

-Tomate rojo: no requiere refrigeración. Si están muy verdes, el proceso de maduración se frena; si por el contrario están muy maduros, pueden sacar hongos.

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Expertos sugieren que el tomate rojo permanezca en un lugar donde la temperatura sea superior a los 15º; debe ser fresco, seco y lejos de la luz solar.

-Banana: una fruta de clima cálido, que al recibir frío puede frenar su proceso de maduración. Esto se nota enseguida porque la cáscara comienza a ponerse marrón o aparecen manchas.

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La temperatura ideal es de 13º, según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura. Conviene conservarlas en un frutero, lejos de la luz y las manzanas.

Así se pone la banana si la guardamos en la heladera

-Papas: si bien aguantan el frío, los almidones comienzan a convertirse en azúcar. Por debajo de los 7º, las papas se tornan harinosas. La recomendación es guardarlas en un lugar seco y preferentemente oscuro.

-Palta: otra fruta que crece en ambientes cálidos, en donde alcanzan su madurez y mejores propiedades nutricionales. En la heladera se echan fácilmente a perder: el frío cambia su sabor, aroma y textura.

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Lo mejor es consumirlas lo antes posible. Si todavía no maduran, se pueden dejar en una bolsa de papel, en un lugar seco pero no tan frío.

-Cebolla: muchos cometen el error de guardar la cebolla en la heladera, desconociendo que el frío acelera su proceso de maduración. Esto hará que se vean amarillas por fuera y que comiencen a pudrirse. Lo ideal es guardarlas en un lugar fresco y seco, alejado de la luz solar.

  Consejo: duran aún más con la piel más seca y el rabo  

-Melón: la temperatura ideal para mantener esta fruta es de 7º; en temperaturas inferiores pierde su dulzor y textura, se vuelve más amarga.

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Una vez que lo cortaste, podés guardarlo sin cáscara en un recipiente con tapa en la parte baja de la heladera (donde menos da el frío).

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