Martín Rodríguez, referente local de la organización, defendió el corte de calles. Aseguró que en algunos barrios de Mendoza la gente debe elegir si come al mediodía o a la noche.

El Polo Obrero dice que están jugando el rol que debería jugar la CGT

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Por: Mendoza PostViernes8 Abr 2022

Martín Rodríguez, referente del Polo Obrero en la provincia de Mendoza se refirió a las últimas protestas que ha llevado adelante la agrupación piquetera en reclamo de fuentes de trabajo genuinas y mejoras en los planes sociales.

En conversación con Ricardo Montacuto, en el programa Te digo lo que pienso por radio Nihuil, el piquetero dijo que todavía no saben si la semana que viene realizarán otro acampe, pero que probablemente se defina alguna medida. "Este jueves nos recibió el ministro de desarrollo social de la nación y ahora hay que ver qué novedades tenemos en cuanto a los reclamos que impulsamos como organización piquetera", señaló.

Por otra parte, destacó que las declaraciones del Rodríguez Larreta, que les pidió a los piqueteros dejar de apretar a la gente, cayeron muy mal en los manifestantes. "El hecho de que una familia, o una compañera, o un compañero, que esta precarizado y lo están negreando porque no le quieren pagar lo que corresponde, toman la decisión de ir a un acampe, está esperando que los que gobiernan, digan qué se tiene que hacer para revertir el 44% de pobreza que hay en la provincia, por ejemplo, con más de 70 mil personas desocupadas".

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"Solo se escuchan declaraciones atacando las medidas de lucha y no plantean una solución concreta a la situación que se ha hecho pública con la difusión de los índices del INDEC y tampoco a nuestros reclamos", remarcó.

El referente indicó que la gente tiene mucha bronca. "Vas al supermercado y no te alcanza la plata. Los compañeros agarran una changa en la construcción y no les quieren pagar lo que deberían. De esta manera se genera un caldo de cultivo que hace que la gente esté desesperada. Muchas veces en los barrios, la gente tiene que elegir entre comer al mediodía o a la noche, por eso van a los comedores comunitarios. La situación es desesperante y nos ha llevado a nosotros a tomar medidas extremas".

"En Mendoza, nosotros estamos movilizando entre 10 mil y 12 mil compañeros".

Para el referente del Polo obrero, hay una desocupación muy grande. Rodríguez apuntó que "hay trabajadores, que teniendo un empleo formal o no, están por debajo de la línea de la pobreza. Además hay una situación que nadie puede negar y que tiene que ver con el déficit habitacional y de urbanización muy grande en Mendoza y en todo el país. Por eso pedimos que se impulsen planes de Urbanización y vivienda que van a necesitar mano de obra. Mucha gente podría acceder a esos puestos de trabajo. Sobre eso planteamos el reclamo de trabajo genuino con un salario acorde a la canasta básica porque si no seguimos en la misma".

Relató que la organización piquetera le ha presentado, al ministro Zabaleta, un padrón de trabajadores en condiciones de entrar a trabajar y un proyecto para crear un millón de puestos de trabajo, pero que no han tenido respuesta. "Lo único que se conoce son declaraciones públicas atacando el reclamo y planteando que nosotros extorsionamos".

Respecto a la grieta que existe entre el piquetero que no trabaja y cobra un plan y el que trabaja y cobra un sueldo, sostuvo que, a su entender, hay una intencionalidad muy grande por parte del gobierno y de algunos medios de comunicación de profundizarla esa grieta e impulsar el odio hacia los trabajadores.

"Un piquetero es un trabajador que, eventualmente o no, en algunos casos de manera crónica, está desempleado o precarizado y esa división la quieren montar sobre cosas que no son reales. Se ha montado toda una campaña que dice que alguien que recibe todos los programas sociales puede llegar a cobrar 60 mil pesos. No sé de dónde sacan esos números. El plan potenciar trabajo son $16.500; la AUH $5.100 y la tarjeta alimentar que son $9000 si tenés más de dos hijos menores de 14 años. Hay algunos planes a los que no podés acceder si cobras otros", explicó.

"Solo un juez puede determinar si cortar una calle es un delito. Ni el periodismo ni nadie".

"Nosotros ejercemos un derecho que está siendo vulnerado. Entramos en una situación de urgencia y es que la gente tiene que elegir cuándo comer. Días atrás un compañero murió electrocutado en una obra porque la empresa no brindó las medidas de seguridad correspondientes y el gobierno tampoco las controla. Trabajaba por un salario menor al que debería haber cobrado según el convenio de trabajo de la construcción. Acá las cosas están muy mal. El gobierno, que tendría que brindar una solución, no lo está haciendo.

"La financiación para realizar las protestas y movilizaciones proviene de los mismos compañeros".

Por último, aclaró que en su organización, la gente puede hacer aportes voluntariamente para cubrir los gastos. "Nosotros rechazamos a los punteros políticos porque se aprovechan de la situación de una familia que vive en la pobreza. Además son una herramienta que tiene los intendentes y los gobernadores para impulsar las políticas de ajuste. En nuestra organización no hay punteros".

"Le hemos ganado la calle al peronismo, a la burocracia sindical, porque son afines al gobierno y están manteniendo la paz social para que pase el ajuste. En cambio nosotros, tenemos una política de combatir esta situación, es obvio que vamos a ganar la calle. Estamos jugando el rol que debería jugar la CGT y las centrales sindicales, porque los salarios están siendo golpeados por la inflación, paritarias a la baja y falta de trabajo. Ellos deberían salir a combatir. Nosotros venimos teniendo una acción consecuente contra el gobierno de Fernández, de Macri, de Cristina, de De La Rua, porque somos independientes del gobierno".

Para finalizar, Rodríguez dejó un mensaje a la ciudadanía: "a la gente le decimos que no se enojen con nosotros cuando cortamos la calle porque estamos haciendo un reclamo que no está siendo respondido por el gobierno, ni nacional ni provincial. Que descarguen la bronca sobre el gobierno que les va a aumentar las tarifas, que le devalúa el peso y que mantiene una política inflacionaria".