León minero: Milei quiere el litio y el cobre para firmar el pacto de Mayo

Javier Gerardo Milei es un presidente outsider de acuerdo con su propia definición de un rol que le viene cómodo como un personaje revulsivo que está al mando de un país acostumbrado a las crisis cíclicas. 

Siente que es un momento clave (como tantos otros) en la vida colectiva argentina, pero con la diferencia que él no pertenece a la dirigencia tradicional argentina que sí representan, por ejemplo los gobernadores.

Son los gobernadores de los 24 distritos con quienes el presidente mantiene una cinchada por la tenencia de los fondos recolectados de los impuestos que paga la empobrecida ciudadanía argenta. Es decir, es un tironeo en la nueva grieta, entre él (que declama representar a la población) y ellos (la casta). Y la pelea es por quién se queda con "la nuestra", hablando libertariamente. Esta primera observación es la que emerge de las declaraciones del presidente que bucea plácido en una pecera zamarreada por el oleaje que él mismo genera. 

Ver: Milei y Aldao: la peligrosa seducción de la barbarie

Su incontinencia verbal, no forzada, y el desparpajo que exhibe le hacen creer que se acerca más al promedio del "argentino de bien", del "laburante" o sea de los mortales que sobrellevamos esta realidad. Y como consecuencia se convence que tiene el aval popular del cual se alimenta como todo dirigente político emergente de los barrios porteños donde la crueldad es un elogio. Eso transmite, produce sorna y azora en la misma proporción. Pero también cataliza y provoca la reacción como los "brotes verdes feministas" que se vieron germinar nuevamente en las calles, el viernes 8M.

De todos modos, mientras transcurre esta escena que se renueva diariamente hay otros canales subterráneos donde fluyen las corrientes que marcan los objetivos últimos de JGM y de su gobierno. Así lo aseguran quienes se arrogan el manejo de la información fina, de la letra chica de las definiciones presidenciales.

La clave, señalan, es una de las condiciones del decálogo que el mismo Milei expuso el viernes 1 de marzo en el discurso ante la Asamblea Legislativa como base para llegar al Pacto de Mayo. Precisamente es el punto 6 que plantea el "compromiso de las provincias de avanzar en la explotación de recursos naturales del país".

El presidente se torna transparente cuando habla de quienes admira, lo hemos escuchado con ese tono mencionar a Donald Trump y de igual modo al empresario global Elon Musk de quien ha dicho que es uno de los principales interesados en la producción argentina de litio para sus autos eléctricos Tesla. Para mejorar nuestro análisis necesariamente debemos remitirnos a la exégeta de Milei, la siempre llamativa Patricia Bullrich quien en medio del ardor de la polémica entre la Nación y Chubut dijo lo que dijo en La Nación+, dos días antes que el presidente hablara en el Congreso. Veamos.

"Es muy importante, si es una provincia (por Chubut) que vive de la pesca, que vive del petróleo, que no vive de la minería porque, digamos, se votó la ley y luego se echaron para atrás, pero podría vivir de la minería porque tiene una planicie, digamos, desde la costa hasta la montaña, tiene todo tipo de minerales y no vive nadie, hay nada más que un millón de guanacos", planteó Bullrich.

Esa es la traducción de la ministra de Seguridad sobre lo que quiere Milei de las provincias en el punto seis del decálogo con el que condiciona a los gobernadores. Veamos qué pasa en Mendoza.

Cornejo entre viñedos y el distrito minero

Aparece como concomitante la charla breve, pero animada y registrada en imagen entre el gobernador Alfredo Cornejo y el ministro del Interior Guillermo Francos durante el Agasajo de la Vendimia organizado por Bodegas Argentinas el sábado 2, y el inmediato y posterior viaje del mandatario provincial a Toronto, Canadá a la feria minera mundial. Hoy domingo 10, retorna a Mendoza y será el momento para que Cornejo vuelva a la Casa Rosada, será un cónclave importante junto con el sanjuanino Marcelo Orrego quien también fue a Canadá para seducir a inversores mineros.

Cornejo ganó centralidad durante toda la semana pasada anunciando desde el país norteamericano con optimismo la presentación ante la Legislatura provincial del proyecto del nuevo Código Procesal Minero (CPM) que desde las Asambleas Mendocinas por el Agua Pura salieron a denunciar como un intento concentrador del Gobierno para facilitar las concesiones mineras e identificaron a Malargüe como "zona de sacrificio". 

Justamente Cornejo fijó su protagonismo presentando ante la elite minera del planeta el "Distrito Minero Occidental" ubicado al oeste de Malargüe que representa la mitad del territorio del departamento patagónico mendocino. Se hizo ver el despliegue de un plan estructurado para vender el "modo Mendoza" como gestión prominera en marcha.

Ver: En Canadá, Cornejo siguió buscando inversiones para el sector minero

Un dato importante termina resultando un pasaje del discurso del presidente de Bodegas de Argentina respecto del impulso minero que parece inexorable por la sucesión de señales reales en ese sentido. El dirigente bodeguero Ángel Bressia hizo una recomendación con tono de advertencia.

"Un apartado especial representa para nuestra actividad, los aspectos vinculados a la minería. Esperamos que su desarrollo se dé en zonas donde no afecte los recursos naturales, visuales ni sociales. La agricultura es agua dependiente en cantidad y calidad. Hemos realizado importantes inversiones productivas que, sumadas al paisaje, al crecimiento gastronómico y la conectividad hacia el oeste argentino, nos han posicionado en el mundo como destino turístico sostenible. Solicitamos que prime la racionalidad al momento de autorizar los futuros desarrollos mineros", dijo Bressia leyendo el antepenúltimo párrafo del texto de su discurso ante el gobernador, la vicepresidenta  Victoria Villarruel y los ministros nacionales Francos y Luis Petri.

En términos reales, el gobierno mendocino dio pistas de su propósito ni bien terminó el acto de asunción de Cornejo hace 92 días. La ministra de Energía y Ambiente Jimena Latorre que acompañó a Cornejo a Canadá traslució el impulso minero en Mendoza. La funcionaria recién asumida en ese entonces señaló al POST que el objetivo era montarse a la transición energética global, explotando los recursos del subsuelo en especial el cobre, mineral revalidado para la fabricación de baterías con litio (el otro mineral con capacidad de almacenamiento de energía eléctrica). 

Latorre fue concisa y precisa en el relato de la idea oficial. Antepuso al propósito minero, a que cualquier proyecto debía cumplir con la restrictiva Ley 7722. Ese argumento fue la base de la sucesión de gestos que luego se dio hasta encontrar al gobernador presentando en Toronto a Malargüe como la tierra apta por licencia social para el desarrollo minero y con prospecciones que indican que hay cobre para extraer.

Sobre el CPM en ciernes se esgrime el libreto de la desburocratización de las gestiones para que las inversiones lleguen a Mendoza tal como lo indica el gobernador y en concordancia con el punto 6 del decálogo libertario para llegar al 25 de mayo para firmar el pacto social propuesto por Milei ¿Cómo llegará Milei y el país a ese momento? Veremos.

Datos, esperando la revolución maya

Estamos a 76 días para llegar al sábado 25 de mayo. Mucho tiempo como para saber cómo nos encontraremos social y económicamente en ese momento. Sin embargo, la proyección de Milei está medida en las tendencias sobre los niveles de inflación que van a la baja, desacelerando el espiral inflacionarion ascendente, pero con una recesión paralizante y deprimente. Aún así, Milei sigue pensando que para ese entonces habrá un dígito de inflación con lo que significa eso en la psicología colectiva argentina.

• Milei sí, pero vigilado. La última medición de la consultora Reale Dalla Torre realizada entre el viernes 23 y el martes 27 de febrero y dada a conocer el martes 5 de marzo reveló que en Mendoza Milei tiene un alto grado aprobación (64,2 por ciento), pero las personas encuestadas (1210 consultadas) muestran la guardia en alto ante posibles embates del gobierno central. O sea, le dan crédito a Milei por el rumbo económico y por haber sacado de pista al kirchnerismo, pero desconfían de la macrocefalia porteña que impregna al presidente. 

• Aval con exigencia localista. Cornejo también recibe un pulgar arriba a su gestión (55,4 por ciento), pero hay que prestar atención a la disquisición que hace Martha Reale sobre su propio trabajo en este aspecto. "El 67 por ciento le exige a Cornejo que se plante ante el gobierno de Milei para defender los intereses de la provincia. Esta posición es respaldada incluso por el 52 por ciento de los votantes de Milei (que lo apoyaron) en primera vuelta y el 74 por ciento del electorado de Bullrich. Solo el 29 por ciento considera que Cornejo debería apoyar a Milei incondicionalmente, incluso si eso implica pérdida de recursos para Mendoza".

• Deadpool libertario. Otra encuesta, a nivel nacional, circula en los grupos de WhatsApp de empresarios y de los círculos rojos. Es una medición de la consultora Giacobbe que tomó 2500 casos en todo el país entre el lunes 26 y el miércoles 28 de febrero. Milei es calificado por Jorge Giacobbe gráficamente como un antihéroe que es aquel que hace el bien, pero de malos modos.

• El dolor es la economía. Destaca este estudio que el presidente tiene una aprobación del 53,6 por ciento y que de las 48 sesiones (meses) del kinesiólogo Milei ya han transcurrido 3 y se mantiene la tendencia que el paciente (la Argentina) soportará solo 12 sesiones. La ventaja a favor del presidente, dice esta encuesta muy leída, es que no tiene a nadie al frente que lo refute con autoridad.

• Hierve la cacerola mendocina. Mientras que, retornando a Mendoza, la consultora local Demokratia entre el lunes 12 y el viernes 16 de febrero tomó datos de 712 habitantes del Gran Mendoza mayores de 16 años sobre la conciencia medioambiental. La medición de la consultora que conduce Nicolás González Perejamo se basó en la realidad excesiva de este verano que está finalizando caracterizado por cortes de la provisión de agua y electricidad, con fenómenos extremos como incendios en otras provincias y en contrapartida, aquí el gran deshielo producido en un corto plazo por las extensas olas de calor, con crecidas de agua en los cauces secos, todo consecuencia de las grandes nevadas ocurridas en el invierno pasado en la cordillera.

• Quién tiene el control. Se destaca en este estudio sociológico el aspecto sobre la duda permanente de la capacidad efectiva del Estado para controlar la explotación de los recursos naturales. La respuesta final es bastante elocuente, el 66,62 por ciento piensa que el Gobierno no puede controlar la explotación de los recursos naturales. Es un diagnóstico que Cornejo tenía en carpeta y por eso su énfasis para promover las reformas legales que le permitan hacer trascender la idea del empoderamiento estatal ante el presunto y verosímil avance minero.