Cristina Kirchner cuestiona la gestión económica de Javier Milei y Luis Caputo, alertando sobre un posible default en medio de su detención domiciliaria.
Cristina: "Qué olor a default"
En un nuevo capítulo de la polarización política argentina, Cristina Fernández de Kirchner (CFK) volvió a escena con una contundente carta pública difundida en sus redes sociales. A 100 días de su detención domiciliaria, la expresidenta aprovechó para lanzar críticas al gobierno de Javier Milei, centrándose en lo que considera una gestión económica riesgosa y perjudicial para el país.
Su mensaje, cargado de ironía y referencias al pasado, reavivó el debate sobre la situación económica y judicial de Argentina, en un momento donde la ciudadanía enfrenta incertidumbre y el gobierno busca consolidar su proyecto político.
La publicación de CFK no solo abordó temas económicos, sino que también incluyó cuestionamientos a figuras clave del oficialismo, como el ministro de Economía, Luis "Toto" Caputo, y alusiones a controversias judiciales que involucran al entorno de Milei. Este pronunciamiento se da en el marco de una movilización convocada por el kirchnerismo en apoyo a la expresidenta, quien cumple arresto domiciliario tras su condena en la causa Vialidad.
Ver: Entre el campeón y la banda: todos los dólares de Caputo
Críticas al manejo económico: ¿Un camino al default?
El eje principal de la carta de Cristina Kirchner fue su advertencia sobre un posible default económico , al que calificó con la frase "¡Qué olor a default!". Según la expresidenta, el gobierno de Milei gastó más de mil millones de dólares de las reservas del Banco Central en solo dos días, una acción que, a su juicio, favorece el "carry trade" en detrimento de la defensa del peso argentino. CFK acusó al ministro Caputo de liderar una "banda del carry trade" que, según ella, repite los errores de la gestión de Mauricio Macri, llevando al país a una situación de vulnerabilidad económica. Además, cuestionó el uso de préstamos internacionales del FMI, el Banco Mundial y el BID para financiar lo que describió como una "fuga a dólar barato".
Denuncias cruzadas
En su mensaje, Cristina Kirchner también apuntó contra Federico Sturzenegger, ministro de Desregulación, a quien acusó de participar en procesos de endeudamiento durante distintos gobiernos. Además, hizo referencia a las denuncias de corrupción en la Agencia Nacional de Discapacidad y a las grabaciones del exabogado de Milei, Diego Spagnuolo, desestimadas por el presidente como "audios de peluquería". Este señalamiento busca, según analistas, exponer fisuras internas en el oficialismo, mientras CFK mantiene su influencia en el peronismo. La expresidenta también destacó que durante los gobiernos de Néstor Kirchner y el suyo propio, Argentina logró saldar deudas con el FMI y devolver depósitos a ahorristas afectados por el corralito de 2001, contrastando esa gestión con la actual.
Ver: "No frenemos, depende de vos", el pedido de Sturzenegger
Movilización y respaldo kirchnerista
El kirchnerismo convocó a una movilización bajo el lema "#CristinaLibre, 100 días de injusticia" en San José 1111, donde CFK cumple su arresto domiciliario. La marcha, prevista para las 15.00, busca visibilizar el rechazo a su condena en la causa Vialidad, que la sentenció a seis años de prisión e inhabilitación perpetua para cargos públicos.
Dirigentes como Axel Kicillof, gobernador de Buenos Aires, se sumaron a las críticas, calificando la detención como un acto que debilita la democracia. Sin embargo, la ausencia confirmada de Kicillof en la movilización refleja las tensiones internas dentro del peronismo, particularmente con La Cámpora.
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