Fue a comprar cigarrillos y no volvió: lo encontraron 30 años después

El hombre nunca salió de Comodoro Rivadavia pero se cuidó de que no loo encontrara su esposa: "Tenía diferencias con ella, me cansé y me fui", confesó.

Fue a comprar cigarrillos y no volvió: lo encontraron 30 años después

Editó: Ana Montes de Oca

La realidad supera a la ficción y, esta vez, la ciudad de Comodoro Rivadavia, Chubut, quedó sorprendida cuando la policía encontró a un hombre que buscaban desde hace tres décadas en la misma localidad, que desapareció luego de decirle a la esposa que iba "a comprar cigarrillos".                                  

El hombre, Adolfo Enrique Sandoval Farías, es un ciudadano chileno que en aquel entonces tenía 32 años y vivía en el barrio Abásolo de Comodoro Rivadavia junto a su esposa. El misterio comenzó entre el 10 y el 15 de febrero de 1993, cuando Farías le dijo a su esposa que saldría a la esquina a comprar cigarrillos y prometió regresar, pero nunca lo hizo.

A pesar de que su esposa denunció su desaparición, el caso quedó en la oscuridad y no se obtuvo ninguna pista sobre su paradero durante casi tres décadas. Sin embargo, en los últimos días, la Jefa de la División de Búsqueda de Personas obtuvo un dato crucial que terminó con el hallazgo del hombre que, increíblemente, vivía en la misma ciudad. 

El diario Crónica difundió la desaparición de Farías 

Armada con esta nueva pista, la oficial principal Daniela Millatruz se dirigió al domicilio donde se suponía que podría estar el hombre de 60 años que había estado desaparecido durante tanto tiempo. La sorpresa fue mayúscula cuando quien los recibió en la puerta no era otro que Adolfo Enrique Sandoval Farías en persona.

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Durante el encuentro, Farías dio una explicación inusual de por qué había abandonado su hogar hace más de tres décadas: "Tenía diferencias con Nelci, me cansé y me fui", expresó el hombre. Lo sorprendente es que, después de partir, nunca volvió a tener contacto con su familia.

Para confirmar su identidad, Farías accedió voluntariamente a someterse a pruebas de huellas dactilares, que confirmaron que se trataba de la persona buscada. 

La oficial Millatruz relató la labor de búsqueda que condujo al inusual descubrimiento: "Comenzamos a trabajar y a buscar información en el barrio Máximo Abásolo, información en la Comisaría Cuarta, que era la última comisaría de aquellos años en la cual se había radicado la denuncia".

La investigación también reveló que Farías siempre había tenido la intención de no regresar a su casa y comenzar una nueva vida. "Tengo entendido que la señora falleció hace unos años. Así que, estamos trabajando para dar con los hijos de ella y poder poner fin a esa historia de aquellos años", agregó Millatruz.

Farías dijo que no quiso volver 

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