Nuevo Quincho: Mientras éramos Nisman, acá pasó de todo

La conmoción peronista por el fiscal. El "planchazo" del Paco a algunos precandidatos. La revuelta pejotista en Guaymallén. Cómo se cocinó el acuerdo Cobos-Cornejo, y la fórmula con Laura Montero.

Nuevo Quincho: Mientras éramos Nisman, acá pasó de todo

Por: Mendoza Post

El gordo estaba profundamente acongojado. Hacía muchos años que la muerte había dejado de ser un ordenador de la política en la Argentina. Y lo del fiscal Nisman lo tenía pésimo, no sólo por la pérdida de una vida sino por el papelón enorme, la profunda vergüenza que estaba pasando el peronismo ante la sociedad, frente a los propios peronistas. Ni siquiera contra Menem Julián había “roto el carnet” del peronismo. Pero lo que estaba pasando era demasiado. Un desastre total, la degradación y el derrumbe más ramplón del poder, imposibles de imaginar dos o tres años atrás, estaban ocurriendo ante los ojos de todo el mundo.

Julián tenía muchos amigos en el kirchnerismo. Muchos peronistas maduros que habían creído en la transversalidad y en el proyecto. Estaban tan desencantados que parecían almas en pena recorriendo los rincones del justicialismo. Otros, bien PJ, mascullaban la bronca por allí y prometían que a los kirchneristas mendocinos no les darían ni el lugar del lampazo en las listas provinciales ni nacionales. Después de todo, y que Dios nos perdone, la muerte del fiscal es un brutal cambio de escenario. (Estos pibes que hicieron del gobierno nacional del General, del Turco, de Duhalde, de Néstor, una estudiantina, están acabados…) pensó para sí. No estaba concentrado ni en la cena. Había elegido personalmente unas bondiolitas de cerdo y las había hecho cortar bien gruesas, de unos diez centímetros, para que aguantasen bien la parrilla. Una vez estuviesen calientes los fierros y listas las brasas –pocas, para desgrasar bien- prepararía su aderezo especial de curry, semillas de mostaza pasadas por el mortero, miel, oliva, sal y pimienta. Las pintaba de ambos lados mientras las asaba.

El Ruso estaba repantigado en una hamaca haciendo cuentas a toda velocidad. No le daba el tiempo para hacer de intermediario con la publicidad de Guaymallén. –Este pelado gasta exactamente 11 veces más que el pelado anterior en publicidad… muchos millones de pesos… alrededor de 15 palos al año…- dijo el Ruso, relamiéndose por las comisiones y regateando el retorno. Julián sonrió para sí. Conocía el dato de amigos K dispuestos a trabajar en secreto para el Marcelino Iglesias antes que darle el voto a los Beverly Ricos del departamento. Puso las bondiolas a asar mientras calentaba el disco para sacar las papas bravas, fritas con cáscara y ají en hebras que su cuñado le había traído de México.

En el cuadro que adorna la pared norte del quincho, la que da a Las Heras, Eternéstor lloraba desconsolado sentadito en una nube. El general lo calmaba como podía, y le pasó un pañuelo de estrellas para que se sorbiese los mocos. El Comandante Presidente, afecto al orden, fue hasta la puerta acompañado de López Rega, que marchaba con el cartelito “1975 - Isabelita Conducción – Aguante el PJ”. Pero el fiscal no llegaba todavía. Lo tenían demorado en el camino hasta saber quién le puso una bala en la cabeza. Cosas de la justicia celestial que aquí serían incomprensibles.

Los muchachos fueron llegando de a uno y el ánimo mejoró un poco. –La Argentina es así… no vamos anestesiando… - dijo el Omar, el radical-radical-radical que habla con todos, mientras picoteaba unas aceitunas negras condimentadas que el gordo había preparado. El Ruso ya había destapado el Malbec Reserve de Marcelo Pelleriti. El tío Giuliano, más anarco que nunca, escupió en el piso y se acomodó un crespón negro en el mameluco. No dijo nada. La revolución estaba llena de muertos, después de todo.

-Yo le pregunté al Aldo Chesi, que sabe un rato largo de armas… - dijo Ludovico, el ex ganso convertido al PRO.

-¿Y qué te dijo?

-Que no puede haber diferencia respecto de si el disparo en la cabeza de Nisman fue a dos centímetros o a veintidós centímetros. La diferencia se advierte a simple vista. Si se hace un disparo con una Bersa 22 a 20 centímetros, queda un orificio casi limpio del tamaño de la bala, con rastros de pólvora alrededor. Si el disparo se hace a dos centímetros, el orificio que deja es del tamaño de una pelota de ping pong…- dijo Ludovico. El Ruso se estremeció.

-¿Saben qué mendocino lo trató a Nisman?- preguntó Julián.

-¿El Pilo?- arriesgó el tío anarco, muy lector de la política de los últimos años.

-Acertaste. En el 2004, por pedido de Néstor, el Pilo lo recibió a Niman en la embajada argentina en EEUU. Le facilitó la logística para laburar allá en el Caso AMIA. Logística… comunicaciones… esas cosas…- comentó el gordo, y después de un silencio reflexivo que pareció eterno, los muchachos se metieron de cabeza en la política local, que había tenido de todo esta semana mientras todo el mundo estaba absorto por el caso del fiscal. El Omar fue el primero que acometió la bondiola y las preguntas a la vez.

-Gordo… qué lío tienen en Guaymallén… qué lindo despelote… ¿Es cierto que el Paco lo bajó a Elizalde?

Lobos-Sgró, en problemas.

Julián no pensaba guardarse nada. –Sí, es cierto. Lo levantó en peso y lo bajó, pero no lo proscribió. Solamente lo apretó muy duro y le dijo que si pensaba jugar en un espacio distinto, que tenía que renunciar, y llevar su lista el 28 de febrero a la Junta Electoral con su guita y sus avales. Así de corta. Porque él como gobernador no iba a bancar nada. El Guillermo quiere ser intendente de Guaymallén y tiene una de las “doce tribus” del departamento. Una pequeña estructura territorial. Lo que pasa es que el tipo no quiere alinearse al sciolismo ni a la Ola Naranja ni al pacto que están cocinando en el PJ con las candidaturas provinciales. Y eso al Paco lo pone de los pelos, porque no quiere tener ni un solo problema con el poder territorial del peronismo. ¿Vos te pensás que en el gobierno ignoran lo que pasa en Guaymallén? Lo saben todos. Del cafetero a los ministros. Pero bueno... parece que hace unos días Lobos pidió donde tienen que pedir los que piden cosas que Elizalde sea desactivado, y así se mandaron... Volviendo al punto, como Ciurca apoya a Lobos porque no tienen otro remedio -otro candidato confiable para el peronismo territorial- hay ciertos temores entre varios justicialistas para pelearle el departamento. Lo que pasa también es que en la agrupación interna "Peronistas que no robamos de Guaymallén" tienen límites y no quieren bancar la corrupción. ¿Por qué te creés que se juntaron 9 de las 12 tribus a ver qué hacían? Los compañeros no quieren votar a Lobos porque el tipo los ha violado en su dignidad… y esas cosas en el territorio, se pagan. La política no es sólo intereses sino también afecto. ¿Y qué afecto podés tenerle a un dirigente que te saca más de la mitad de tu sueldo para enriquecerse? Porque si hubiese sido para el partido, para financiar la política, para los necesitados, vaya y pase. Pero Lobitos y su mujer se la echaron al bolso. Y los peronistas de verdad no se lo bancan más…- dijo el gordo, y bajó la parrafada con un generoso trago del Malbec del Marcelo Pelleriti.

-¿Pero Abraham va o no va? No me queda claro… Ayer leí en varios diarios que se han estado juntando…- dijo el tío anarco, que no quiso probar las bondiolas porque son oligarcas. Se había traído un queso cáscara roja y salamín picado grueso para la cena. Los andaba llevando en el mameluco.

-No ha dicho nada ni a sus amigos, pero lo están tanteando. Lo que pasa es que la mano en el departamento viene muy pesada, la campaña de los radicales está muy agresiva haciendo foco en la corrupción, imaginate cuando empiecen a caminar juntos Cobos con Laura Montero, Cornejo, Marcelino Iglesias. Miren… hay peronistas laburando en contra de Lobos y desparramando “data” por todos lados. Elizalde, Germán Ejarque, están construyendo ahí también. Y la percepción del PJ es que se pierde Guaymallén, lo que sería una catástrofe porque sin Guaymallén es muy difícil ganar la provincia. Pero los que más saben, temen que Lobos cumpla su promesa de hace unos años…- dijo Julián tratando de meter misterio. Lo interrogaron con la mirada.

-En una de esas peleas territoriales, unos años atrás, amagó a irse con Cobos…- dijo el gordo con pretendida seriedad. 

Los amigos estallaron en carcajadas por primera vez en la noche.

-¡En serio! Lo que pasa es que ahora sería un quemo aceptarlo. No sé… hay que esperar novedades… ¿Vos te pensás que a Luis Francisco, al “Gaucho” Arenas, a Moreno Serrano, al propio Abraham, les gusta que los espíen? Parece que el viernes había un tipo meta sacarles fotos cuando entraban a la reunión. Y la gente de Elizalde se reúne en Capital, en un aula de la escuela Vicente Zapata para evitar las persecuciones… ¿Vos creés que les gusta? Miren… el Luis Lobos supo ser un tipo muy laburador de la política… pero ha aprendido lo peor. Cree que el apriete y la extorsión y la guita son las únicas formas de hacer política… y la verdad es que además, hay otras…- dijo el gordo, y volvieron las risas.

-Yo supe que el peronismo planea tener muchos precandidatos en Luján y en Guaymallén para licuarlos y que el Carlitos López Puelles y Lobitos transiten mejor las PASO…- dijo el Omar.

-Bueno… es cierto… pero no sé si en el caso de Guaymallén será efectivo… Qué se yo… hay mucho choreo con el que el peronismo no se quiere manchar…- insistió Julián, para seguir con el resto mientras sus amigos se iban sirviendo las papas bravas, en platos rebosantes. El anfitrión siguió el hilo de la charla.

-Lo provincial está difícil, aunque el hecho de que el candidato radical sea Cornejo y no Cobos hace las cosas menos temibles. Se habló mucho de la reunión del lunes con el Paco, una reunión política con gente de su gobierno. Se enojó con el Marcelo Costa, con Elizalde, con Espina, con Zandomeni, hubo para todos. Pero lo que peor le caía es que no todos explicitaban dónde jugar. Por eso el enojo con Elizalde. También mostró cartas. Matías Roby dijo que iba a jugar la gobernación y el Paco, que iba a acompañar a todos los que jugasen. La idea es que lo hagan todos dentro del proyecto de Scioli. Para los que no, no habrá ni un mango para imprimir 30 volantes. Paco necesita estar dentro del acuerdo del peronismo. Ese mismo lunes el Diego Martínez Palau lo fue a ver y le dijo que él iba sí o sí, que tenía el banque de Randazzo y que no lo iba a desperdiciar. Y el Paco le dio aire. Pero todos los que vayan a jugar van a tener que renunciar al gobierno antes del 28 de febrero, y si encima no van con el “acuerdo”, van a tener que cruzar el desierto en sandalias y con una latita de anchoas de refresco. No les van a dar ni la Red Bus para los militantes.

-¿Y Martínez Palau se va a animar contra todo el aparato del PJ?

-Sí. Ya anduvo de visita en la Casa Rosada… ¿Ven? Estuvo con el Germancito Ejarque… mirá la foto que me llegó al WhatsApp…- dijo el gordo. Todos se asomaron a mirar.

-Esa foto con la Casa Rosada hoy es una mochila…- dijo el Omar. –El Caso Nisman es un cambio de escenario brutal…- agregó, frunciendo el ceño.

-Es cierto. Por eso desdoblar las elecciones al final ha estado bien. El peronismo mendocino va a tener cómo defenderse…- dijo el gordo, añorando las épocas en que el peronismo era eso peronismo.

Los muchachos brindaron por la democracia, la memoria y la justicia, y pasaron a otro tema.

-Omar… contá cómo fue el acuerdo entre Cornejo y Cobos… que eso fue la sorpresa de la semana…- pidió el Gordo, aliviado de parar un rato con las contradicciones internas.

-Miren… desde hacía rato que el petiso le venía avisando a Cobos que él no se bajaba y que estaba dispuesto a dar cualquier interna. El domingo pasado hubo una reunión en la casa del Juan Carlos Jaliff y ahí se juntaron los tres: Cornejo, Cobos y el senador bostero radical. Y ahí se fue cocinando la cosa. El Alfredo jugó fuerte, dijo que estaba dispuesto a dar una interna incluso contra el Julio, pero Cobos estuvo firme en lo suyo. Dijo clarito que no quería ser ni candidato a gobernador ni gobernador y que seguiría su carrera presidencial y allí se fue acomodando la cosa. El Alfredo le pidió al Julio que baje a su tropa lo que piensa porque abajo había mucha contradicción y muchos traficando influencias en nombre suyo y el Julio estuvo de acuerdo. Rápido, Cornejo pidió por la Laura Montero. La considera muy bien, una mina muy inteligente y estudiosa y mejor candidata a la vicegobernación que cualquier otro de los radicales incluyendo el Enrique Vaquié. Julio pidió unos días de consultas y el jueves se terminó de atar todo. Es una buena fórmula… y los que quedaron afuera finalmente van a entrar, y los territoriales del Este que están bastante calientes, también. El Alfredo pidió algunos sacrificios patrióticos, como enviar al Luis Petri de candidato en San Martín, donde el peronismo está muy bien con Giménez… y ahora habrá que caminar. Habrá mucho candidato radical donde la UCR no es gobierno. En San Carlos, donde el viernes estuvo el PRO en pleno, van Marcelo Romano y Daniel Ortega. En Guaymallén están Fabián Manzur, el Marcelino Iglesias que es del Julio… no sé qué hará Scattaregia… pero bueno ahí en Guaymallén está el problema de que muchos correligionarios son de la “cooperativa” y han estado en silencio… veremos qué pasa…- dijo el Omar, y se sumergió en la copa de Malbec.

El tablero político estaba casi listo. Y ahora todos se prepararían para las internas de abril y las generales del 21 de junio.

La cena iba llegando a su fin. Después de las bondiolas, el gordo sacó el budín de pan que había preparado el día anterior. Lo hacía con mucho huevo y vainilla y caramelo de naranja, casi como un flan, con pedazos de manzanas adentro. Una delicia.

Tras la copita obligada de licor de manzanilla a modo de bajativo, los amigos rumbearon para los autos.

-Gordo… ¿Te enteraste la última novedad de la Casa de Gobierno?

-No… ¿Cuál?

-¡¡Volvió el Pancho García!!

-¿Volvió?

-Sí… con todo. Se le acabaron las vacaciones.

-Y bueno… a veces pasa…

-¿Qué sabés de los compañeros de fórmula de Roby y de Martínez Palau?

-Tengo unos pesos a mano de Tanús para el Matías, y de Germán Ejarque para Diego.

-Mirá vos… Decime gordo… ¿Qué va a pasar ahora?

-En los próximos meses, vamos a ver la más feroz pelea de servicios, carpetazos y operadores que se hayan visto jamás en la República. ¿Sabés qué pasa? Alguien dijo una vez que el mensajero es el mensaje. Nisman fue el menaje. Estamos muy pero muy jodidos. Estos muchachos cultivaron un estilo de armar poder que se les ha vuelto en contra.

-¿Y vos qué pensás? ¿A Nisman lo mataron?

-Sí. No tengo dudas. A Nisman lo mató el odio de todos. Es el precio que vamos a pagar por lo que hicimos.

-Las revueltas tienen muchos más muertos… ¿por qué éste es importante?

-Porque con Nisman se murieron la verdad y la justicia. Y entonces…

-Sí… ya sé… No tenemos nada.

-Exacto.

Y así, luego de un rato de silencio y envueltos en una sensación de esas bien de mierda, desaparecimos en el sentido estricto de la palabra.