Elecciones: el temor del PJ a una guerra interna feroz

Hoy se reúnen los intendentes con Pérez para analizar las opciones electorales. Pregunta incómoda: ¿Qué candidato a gobernador llevará cada intendente? La "invasión" cruzada de los territorios.

Elecciones: el temor del PJ a una guerra interna feroz

Por:Ricardo Montacuto
Director Periodístico

Adelantar y desdoblar o no, esa es una cuestión. Pero no es la única. Los intendente del peronismo tienen el temor de desembocar el proceso de las PASO en una guerra feroz y de pronóstico incierto, por la multiplicidad de combinaciones que permite la ley provincial de las primarias abiertas cuya autoría es del senador peronista Fernando Simón, aunque no es responsable final de lo que salió de la Legislatura: allí metieron la mano muchos.

Ya se sabe que hay varios con intenciones de adelantar, especialmente Emir Félix en San Rafael, Rubén Miranda en Las Heras, Alejandro Bermejo en Maipú y el denunciado por enriquecimiento y lavado Luis Lobos en Guaymallén. A ellos se pueden sumar los intendentes de Tupungato, Tunuyán, Alvear y Malargüe, todos peronistas. Es muy probable además que los tres territoriales del Este (La Paz, Junín  y Rivadavia), que son radicales, adelanten sus propios comicios. De todos ellos, el único que no será candidato a intendente pero peleará la gobernación será Rubén Mirada. Y el vicegobernador Carlos Ciurca irá por la intendencia de Las Heras.

Todo el mundo está muy apurado. La prevención de los intendentes es no caer en sus territorios por el arrastre nacional que -de momento- muestran las encuestas a favor de los candidatos de la oposición en Mendoza. El PJ teme una tormenta perfecta en la que Alfredo Cornejo, Ernesto Sanz, Julio Cobos, y Mauricio Macri aparezcan combinados para arrebatarles el poder provincial, y ello conlleve derrotas territoriales.

El miedo no es zonzo. Ya pasó en 2009 y 2013. Pero hay temores más inquietantes, como el de una guerra interna, si antes el PJ no acuerda un conjunto de reglas básicas que nadie termina de determinar bien cuáles son. Algunos jefes comunales preguntaron, por ejemplo: 

¿Cuántos candidatos a gobernador va a llevar cada candidato a intendente del peronismo?

La respuesta es muy compleja. Alguien dijo "Que los candidatos a intendentes llevan en sus boletas a todos los candidatos a gobernador". Pero otros dijeron "¡Minga!" El resultado de todo este tironeo podría ser , por ejemplo, que Alejandro Bermejo -candidato a la reelección en Maipú- lleve sólo a su hermano el senador Adolfo como candidato a gobernador, y que entonces la Corriente y el sector Integración le "levanten" cualquier Tótem en Maipú para que sea candidato a intendente con la idea de enfrentarlos, y limarles el territorio en favor de sus propios postulantes a la gobernación, que son Rubén Miranda y Omar Félix. Lo mismo ocurriría en Las Heras y San Rafael pero al revés. 

De repente, podríamos tener a todos los sectores del peronismo mendocino "armando" candidatos a intendentes en el territorio "del otro compañero", violando una regla básica de convivencia que cada tanto se pone en peligro, pero nunca como ahora.

"El peronismo no está como para esa pelea". 

Como antídoto para la "invasión cruzada" del territorio, surgió la idea -entre algunos intendentes que pidieron reserva de la fuente- de adelantar la PASO de gobernador antes que la de los intendentes, y resolver una parte del problema. O de adelantar sólo la de los intendentes. A lo primero, el gobernador Pérez dijo que no. Lo segundo tiene una contraindicación: Se van a resolver las postulaciones municipales, pero nadie podrá evitar la "invasión" con listas distritales de diputados y senadores provinciales en favor de la candidatura a gobernador de cada uno. 

Ayer circuló con insistencia la versión de que Emir Félix y Rubén Miranda anunciarían antes de fin de año, posiblemente el lunes, su fecha de elecciones adelantadas. Pero no será posible si antes no se resuelve la convivencia interna de todos los candidatos del peronismo. Anuncios no consensuados llevarán a la guerra interna, y muy probablemente a una derrota general. Por la noche, la versión perdió fuerza.

El gobernador Francisco Pérez se muestra como el principal opositor a la idea de separar las elecciones. Aunque, entre resignado y molesto, el lunes dijo: "El que quiera desdoblar, que desdoble y listo".

Otra fuente en el peronismo dijo que ahora el tema es "Acá adelantamos todos, o no adelanta nadie", temiendo por la imagen hacia afuera del PJ en su conjunto, aunque hay que decir que al momento de sancionar la ley PASO, el peronismo se opuso a que la fecha electoral y el desdoblamiento quedasen fijados justamente en ese instrumento. Se reservaron la potestad de votar según la conveniencia política y ahora les cuesta desentrañar el nudo.

Pérez se reúne hoy con Ciurca.

Hoy cerca de la una de la tarde, se reunirán Pérez, Ciurca y los intendentes buscando avanzar un poco más. Hay una fecha tope que es el cinco de enero, que es más política que técnica. Es que los caciques departamentales quieren terminar todo el asunto provincial y municipal antes del 10 de junio, cuando cierra el plazo para las adhesiones y alianzas nacionales. Es por aquello de soldado que pierde, sirve para otra batalla. Que nadie se quede afuera.

Una incógnita importante es saber qué piensa realmente el vicegobernador Carlos Ciurca. Hasta ahora sólo ha hecho declaraciones políticamente correctas. Pero Ciurca es el responsable de la campaña presidencial de Daniel Scioli y la “Ola Naranja” en la provincia. Pérez va en el mismo barco. ¿Le servirá a Scioli que en Mendoza los jefes territoriales se “corten” solos? Difícil, aunque aquí el asunto es definir las prioridades tanto como quién las define. ¿Se puede pedir, conseguir y ganar todo? En política, y más en democracia, es imposible. Ese es el dilema hoy que enreda a los principales actores del peronismo. 

Esta nota habla de: