Perdió parte de la retina tras mirar fijamente un puntero láser

A pesar de que el adolescente solo miró el láser directamente durante unos segundos, inmediatamente después experimentó una forma de pérdida de visión durante varios minutos.

Perdió parte de la retina tras mirar fijamente un puntero láser

Por: Mendoza Post

Un adolescente en Ohio, EEUU, tuvo un desafortunado accidente con daño permanente a los ojos y la visión luego de haber mirado varios segundos un un puntero láser.

Sus médicos explicaron a medios locales que el joven estaba jugando con sus amigos a "un juego de disparos" con el puntero láser, en este caso uno destinado a mascotas en ejercicio que se vende como "de baja potencia". En un momento dado, el adolescente miró directamente al puntero durante varios segundos.

Según cuenta la doctora Carol Vitellas de la Universidad Estatal de Ohio en su informe:

"Se cree que el aumento de la disponibilidad, las cada vez mayores potencias de salida y el desarrollo de dispositivos que emiten en las longitudes de onda azul y verde son atribuibles. Aunque comúnmente se cree que es seguro, incluso una breve exposición al ojo con un puntero láser puede provocar una pérdida permanente de la visión, y los niños están particularmente en riesgo".

 A pesar de que el adolescente solo miró el láser directamente durante unos segundos, inmediatamente después experimentó una forma de pérdida de visión durante varios minutos, después de describir el efecto visual inicial como una luz brillante. 

Cinco meses después, el niño, que experimentaba visión borrosa continua y pérdida parcial de la visión en su ojo derecho, fue a ver al oftalmólogo.

El joven explicó que a veces no podía ver letras individuales cuando leía un texto con el ojo derecho (con el ojo izquierdo cerrado). Las posteriores pruebas revelaron que la agudeza visual estaba levemente disminuida en su ojo derecho, aunque se presentaba como normal en su ojo izquierdo.

Una visita posterior seis meses después descubrió que su agudeza visual había mejorado a un nivel normal en ambos ojos, aunque ese resultado aparentemente positivo no reflejaba el daño causado dentro del ojo.

A través de un sistema de escaneo óptico de alta resolución, los doctores encontraron el daño causado a las retinas, donde regiones enteras de células fotorreceptoras sensibles a la luz (también conocidas como bastones y conos) quedaron "destruidas" por el láser. "No queda nada en la zona, las áreas afectadas están desprovistas de conos", explicó el doctor.

Finalmente, al chico se le diagnosticó quemaduras maculares por láser en ambos ojos. Las lesiones causadas por el láser aparentemente habían erradicado las células fotorreceptoras de las retinas con dos lesiones en el ojo derecho y una en el izquierdo.