Zaira Nara: "Con Jacko descubrí el campo y soy muy feliz"

Zaira (26) aprendió a reírse de los rumores. “No puedo andar a caballo... es que... con la panza de mi embarazo...”, ironiza después de un guiño al fotógrafo. Agrega que está acostumbrada “a que inventen”, pero que por momentos le indigna que exageren sobre sus ganas de casarse y tener hijos.

¡No me quiero casar! 

“Leo: `Zaira otra vez se quería casar´. Y pienso: ¡No! ¡Yo no me quería casar con mi ex! Y con mi primer novio, bueh... ¡tenía veinte años! ¡Tampoco anuncié casamiento con todos! ¡No me quiero casar! ¡Ni estoy pensando en tener hijos! De hecho, amo a mis sobrinos, pero estoy con ellos una semana ¡y ya se los quiero devolver a Wanda! Así que, ¿embarazada? ¡No! Para nada. Por el momento no está en mis planes. Mi novio tal vez tenga más ganas...”, ríe Zaira Nara.

Es como si los tres días a la semana que pasa en el campo, rodeada de verde y silencio, junto a su novio, Jakob von Plessen (35), la ayudaran a bajar un cambio, poner las cosas en perspectiva, no culparse por lo que pudo haber hecho en el pasado y disfrutar del presente sin temerle a lo que puedan decir de ella, según publica la revista Gente.

–¿Qué opina Wanda de Jakob? Lo conoció en Ibiza.

–¡Le encantó! Es que mi novio es un amor. Tiene buena onda y es muy simpático. Y con Mauro (Icardi) pegó la mejor. Porque mi cuñado es una gran persona. Tal vez la gente conoce su parte... mediática. Pero es un pibe de barrio. Fuimos sin miedos ni prejuicios y todo funcionó perfecto.

DE TIERRA ADENTRO

Después de cortar a mediados del 2011 con el futbolista uruguayo Diego Forlán (36), Zaira salió (con idas y vueltas) con el tenista Juan “Pico” Mónaco (31), hasta octubre del año pasado. En diciembre conoció a Jakob von Plessen (le dicen Jako, que se pronuncia “Yako”) y la cosa fue muy de a poco.

“Nos presentó una amiga en común. Me dijo que tenía un chico para mí y me mostró una foto de él a caballo, entre leones y elefantes. Pensé: `Nada que ver conmigo. ¿De qué voy a hablar con este pibe?´. Salimos en grupo. Pero yo estaba bastante tímida y él tampoco me daba demasiada bola”, cuenta Zaira sobre los comienzos. Lo cierto es que se gustaron, empezaron a salir y, cabalgata en la Patagonia de por medio, se enamoraron.

“Ultimamente estoy cuatro días de la semana en Buenos Aires y tres en el campo, en la casa de Jako. Jamás me hubiera imaginado esta vida para mí... Pero me hace mucho bien. Es un cable a tierra”, detalla sobre su vida part time en el campo de Sierra de los Padres, a 35 kilómetros de Mar del Plata.

–Aprendiste a andar a caballo.

–Sí. Cuando fuimos al Sur anduvimos entre montañas, ¡con el precipicio ahí nomás! Yo confiaba más en las habilidades de mi caballo que en las mías como jinete. Son animales que están acostumbrados a la cornisa. Hace unos días acompañé a mi novio a una carrera de Endurance (competencia a caballo de 40, 80 y 120 kilómetros) y quedé fascinada. Pero para competir tenés que entrenar, y a mí todavía me falta. Eso sí, me animo a entrar cabalgando al Festival de Jesús María. Me convocaron para conducirlo en enero del año que viene. Pensar que yo sólo me había subido a un caballo para hacer fotos para GENTE, en Punta del Este...

–¿Te entusiasma lo de Jesús María?
–Me encantó la propuesta. Tu mejor sábado y Tu mejor domingo (por Canal 9) es un programa muy folclórico y federal. Nuestro payador, Nico Membriani, es parte del Festival. Por eso los organizadores vinieron al programa. ¡Me habrán visto tan gaucha que me convocaron! Hay mucho que uno no sabe de nuestro país, a pesar de ser argentino. Ahora sé lo que es una bota de potro, una bota sureña, una norteña... No quiero ser una conductora que sólo sabe de modas.

AFRICA MIA

“En Ideas del Sur, productora de mis programas, me dan mucha libertad. Jamás me dijeron `tal latiguillo no va´. En algunos, como Tendencia, tenía que hablar de una manera en particular… Pero ahora, después de once años de trabajo, siento que encontré mi perfil”, cuenta Zaira sobre el ciclo que conduce desde el año pasado junto a Diego Pérez.

Agrega que además maneja la marca Frany and Zoey, junto a la modelo Flor Salvioni, su amiga y socia: “La empezamos a pulmón, con nuestros ahorros. Abrimos un local en Palermo. No quisimos darla a conocer hasta no tener armada una estructura. Hay muchas modelos que lanzan su marca y tal vez no tienen local ni producción... A nosotras nos va bien. Con Flor nos encargamos de todo. Yo barro el piso, cuelgo perchas, recibo gente...”.

–¿Te va la vida lejos de la ciudad?
–Sí. Tal vez necesito el mix. No soy de ir a eventos ni salir de noche. Cada tanto necesito recluirme. Jako descubrió ese aspecto de mi personalidad. Me conoce de verdad y se olvida de que soy “famosa”. La tele no es lo único en mi vida. Descubrí el campo y soy muy feliz. Allá me siento una más.

–¿Cómo es Jakob?
–Re campero. Está todo el día en bombachas de campo. Si lo ves en jean, ¡es porque yo se lo regalé! Se lo di y le dije: “Por si tenés que acompañarme a algún lado”. Se los puso para ir conmigo al teatro a ver a Diego Pérez... ¡Después, los amigos lo gastaban! Es una persona re tranquila, tiene mucha paz. Y no es millonario, sino un chico re normal. Simplemente le gusta el campo y por eso vive allá. Por fin encontré un compañero.

–Organiza safaris en Africa. Súper romántico... ¿No te animás a acompañarlo?
–¡Me encantaría! Está tratando de convencerme. Porque, como me dice él, es parte de su vida. Desde hace quince años pasa seis meses en Africa y seis acá. De temporada en temporada de verano. Son safaris a caballo. Una parte de su vida que todavía no conozco... En algún momento, más adelante, iré. Es que no queda acá nomás. Si bien viajo mucho y este año estuve en Playa del Carmen, Milán e Ibiza, siempre fueron viajes de cinco días. Jamás falté al programa.

–¿Cómo vas a hacer cuando se vaya?
–No sé... Por lo pronto, el plan es que se vaya menos tiempo. Además, va a ser complicado, porque allá está en campamentos donde no tiene computadora ni señal de celular. En principio se irá en septiembre, por un mes y medio. Le apasiona lo que hace. Ama a los caballos y la naturaleza. Africa debe ser espectacular, pero tengo que estar preparada para ir. ¡No es lo mismo ver un león desde un jeep, que andando a caballo! Veremos...