Ante un sistema judicial que falla, la denuncia pública

Las denuncias de violencia de género y abusos son generalmente desestimadas, los fiscales no investigan y el cuidado entre mujeres es la herramienta fundamental para la condena.

Ante un sistema judicial que falla, la denuncia pública

Por:Ana Paula Negri
Periodista

"La impunidad es lo que hoy los mantiene de pie a quien abuso de mí", así se expresa María Victoria Coria, @Tori_Coria, la joven que abrió un hilo de "Machos/Abusadores de Mendoza" en Twitter en la reflexión pública que fue adjuntada a la medida cautelar que se declaró "abstracta" por el juez Darío Penisse ya que los tuits fueron eliminados.

En su momento, este medio recuperó seis testimonios reales de abuso detrás de los nombres que se publicaron en Twitter.

Tori misma reconoce que escribir los nombres de los varones que abusaron de mujeres en Twitter no fue lo más adecuado y que se dio en el marco de la denuncia pública que hizo Thelma Fardin junto a actrices argentinas con un nivel de exposición masivo.

La denuncia pública de Thelma Fardin

Pero entiende que "no podemos negar que los grados de violencia que estamos viviendo las mujeres en este momento hacen que tengamos que generar diferentes herramientas de cuidado/autocuidado para protegernos, cuando las instituciones no alcanzan a hacerlo" y agrega: "El sistema legal vigente determina que no podemos asegurar como certeza lo que no ha sido investigado por las vías judiciales correspondientes" tal como sucede con los varones expuestos en su cuenta de Twitter, "quienes como decía jurídicamente, no se puede asegurar la inocencia o culpabilidad porque no han atravesado una investigación judicial".

Por este mismo motivo asegura que "para expresarme debería haberlo hecho potencialmente hasta que existan certezas (en términos jurídicos) al respecto" aunque rescató: "diferente es lo que pienso y siento, yo sí creo en cada uno de los relatos que me llegaron e invito a ponerle voz propia a las denuncias".

"Mi intención fue y sigue siendo alertar a las demás mujeres para que nos cuidemos entre todas. ¿Por qué digo entre todas? Porque gracias a mi experiencia personal, donde fui abusada y mi abusador no recibió condena alguna -cabe destacar que lo denuncie apenas sucedió el acto- encontré que una ayuda, no solución, fue alertar a las demás mujeres mediante las redes sociales, para que no les suceda lo mismo", escribió.

"La impunidad es lo que hoy los mantiene de pie a quien abuso de mi, quien abusó de otra y quien aún sigue abusando. Verdaderamente, en este contexto que vivimos, el Estado no está pudiendo brindar, efectiva e integralmente respuestas para quienes atravesamos por estas situaciones. Queremos y necesitamos con urgencia, respuestas estatales, que como decía, no son las que se vienen dando. Actualmente, las mujeres estamos sobreviviendo", reflexionó.

"También identifico que cargué con haber hecho la denuncia de muchas otras, cuando lo mejor hubiera sido que cada una le ponga su propia voz, visibilizarnos. Pero esto fue así porque muchas de las mujeres que han sufrido abuso son también adolescentes, jóvenes, que tienen miedo, que aún no han podido contárselo a sus madres/padres, ellas son precisamente las más desprotegidas por las instituciones", afirmó.

"Luego de que hablara sobre mi situación de abuso y también la denuncia que hace Thelma Fardin, muchas mujeres se animaron y se están animando a denunciar lo que tanto callaron. A ellas y a todas las que se animaron quiero decirles que no volvemos al silencio nunca más y que por favor se animen a denunciar la violencia en todos sus ámbitos. Lo personal es político, la violencia no es íntima, es una cuestión de orden público", concluyó.

Por su parte, Florencia Alderisi, parte del equipo defensor junto a Patricia González, afirmó en diálogo con el Post que en muchos casos se ha encontrado con situaciones de violencia o abusos en los que como abogada tiene que recurrir a psicólogas para que preparen a la víctima para enfrentarse a todos los procesos judiciales de investigación, preguntas y pericias que harán que tenga que volver a pasar por ese momento.

El portal Chequeado publicó en diciembre del año pasado un informe y relevó que: "Sólo el 12,5% de las ofensas sexuales (que incluyen, además de las violaciones, los intentos de violación y el contacto físico indeseado) son denunciados, de acuerdo con la encuesta de victimización realizada por el INDEC en 2017".

"Los niveles de impunidad en los casos de violación son altos, pero esto no es algo que pase sólo con los delitos sexuales, sino con muchos otros. Sin embargo, la forma en la que se desestiman los casos de violación muestran la discriminación de género en el proceso judicial", explicó al portal Natalia Gherardi, directora ejecutiva del Equipo Latinoamericano de Justicia y Género (ELA). La especialista apuntó, entre otros factores, a la falta de acción de los fiscales, que en muchos casos terminan desestimando las causas y centran su investigación en el testimonio y la credibilidad de la víctima.

Un estudio que analizó 158 denuncias de violencia de género encontró que transcurridos dos años un sólo caso llegó a una condena en juicio oral, y otras cinco tuvieron condenas a través de un juicio abreviado (es decir una negociación entre el fiscal y el acusado, aprobada luego por el juez). La mayoría de las denuncias se archivaron o desestimaron.

"La escasa cantidad de condenas aplicadas a los denunciados deja de manifiesto la ausencia de respuestas por parte del sistema de administración de Justicia a las denuncias por hechos de violencia doméstica", concluye el estudio que fue elaborado por el Ministerio Público Fiscal. Se basa en denuncias por violencia de género hechas en la Oficina de Violencia Doméstica de la Corte Suprema, de los cuales alrededor de la mitad habían sido consideradas de alto o altísimo riesgo por la Oficina.