El circuito de la Moda Circular llegó para instalarse en Mendoza

El nuevo movimiento de la industria de la moda, que promueve un consumo consciente y responsable a través del rediseño, reutilización y reciclaje de la ropa, es la llamada moda circular, que ya tiene un circuito donde funciona y se hace cada vez más conocido en Mendoza.

Sus seguidoras destacan que es una forma más de colaborar con el planeta, un proyecto sustentable que replantea de algún modo el rubro textil. Se trata de un nuevo paradigma que rediseñó la forma de ver la moda.

Además, ya es tendencia en algunos sectores y tiene seguidores y seguidoras que buscan incorporarse a esta forma de consumo que abarca todos los procesos de manera integral.

Un proyecto que comenzó en la pandemia

Sabrina Schvartzman y Carolina Pérez Cabañas son mendocinas y emprendedoras por naturaleza, ya que han sumado varios proyectos antes de embarcarse en el proyecto que alienta la moda circular. Crearon su propia marca, Las Barceló, y ya son conocidas en el medio.

"Primero comenzamos diseñando y creando distintos productos, hasta llegar a este mundo nuevo de la circularidad, que apenas lo conocimos nos apasionó.

Es un nuevo movimiento de la industria de la moda, que promueve un consumo responsable a través del rediseño, reutilización y reciclaje de la ropa", comentan las chicas que empezaron con la temática en el 2020, organizando ferias de dos o tres días, hasta que se animaron a dar un paso más y abrieron el primer local en una casona antigua en plena Quinta Sección (Granaderos 41, Ciudad).

En el flamante espacio venden prendas como faldas, camisas, vestidos, remeras, calzados urbanos, carteras, pantalones de tela, jeans y accesorios, algunas sin uso y en su mayoría de segunda mano en perfecto estado y mayormente de primeras marcas. Para sumar a la sustentabilidad sólo utilizan bolsas recicladas.

Un aporte beneficioso

Carolina y Sabrina remarcaron que con este ambicioso proyecto buscan "reducir el impacto que produce el deshecho de ésta en el medio ambiente y evitamos la utilización de nuevos recursos no renovables para la fabricación de nuevas prendas. Esta nueva manera de consumo, es tendencia no sólo por los beneficios que le trae al medio ambiente sino por sus ventajas económicas. En síntesis, es dar una nueva oportunidad a prendas que alguien ya no usa y que puede tener un nuevo destino".

La idea se empieza a gestar en 2010, cuando las emprendedoras viajaron a Europa con mochila al hombro y estando en Barcelona conocieron la primera feria de moda circular, algo que las motivó para empezar con el nuevo proyecto en Mendoza.

"Ese día nos impactó la idea y todo lo bueno que puede surgir de este movimiento. Nos dijimos que algún día podríamos armar algo así en nuestra provincia. Y así fue como en el 2020 decidimos probarnos y organizamos con amigas nuestra primera Feria en la vereda de la casa de los padres de Caro en Chacras de Coria. Desde ese momento y hasta ahora pasaron muchas ferias y tenemos mucho trabajo", contaron, felices, las mendocinas.