Un enigmático hostel en Mendoza que es único en el mundo

Por diferentes motivos y sobre todo porque son una excelente opción para disfrutar al aire libre, los fogones, las noches estrelladas y un ambiente ameno y distendido, los hostels, que fueron furor en los años 90, vuelven al ruedo con propuestas renovadas y en algunos casos muy originales y jugadas como en este caso.

De a poco se han instalado en las afueras de la ciudad, algo diferente a lo que sucedía en años anteriores donde se concentraban por el Centro. En la calle Mitre, cerca de la plaza Independencia, o en Avenida España en la zona de Tribunales, estaban los más concurridos.

La pandemia también arrasó con mucho de ellos, y pocos pudieron seguir o reinventarse. Uno de los que siguen en pie es el rupturista Lemon Tree Hostel, ubicado en la Ruta Provincial 82, de Luján de Cuyo, un espacio que abrió hace varios años pero que sigue vigente por sus servicios y la calidez de los propietarios. Basta con entrar a las redes y ver los comentarios que dejan los visitantes para confirmar que es un lugar para recomendar.

La gran diferencia

La particularidad que tiene es la de ser un alojamiento con mucho para ver. Por ejemplo, sus paredes son murales pintados con personajes famosos como Marilyn Monroe, con el estilo pop art, que dejó inmortalizado Andy Warhol. Muy cerca hay un enorme dibujo de protagonistas de la famosa serie Breaking Bad, hay sillas y sillones con el estilo del cubo Rubik, cómodos sillones rústicos, y hasta un mural con la cara de Gustavo Ceratti.

Todo se mezcla para crear un ambiente divertido y cálido. Y esa impronta se la dio Matías Romeri, su dueño, que utilizó la casa de sus padres para concretar su proyecto.

"En sus inicios el hostel fue ambientado con la técnica del muralismo, pero con el paso del tiempo fuimos recreando a través de maniquíes, y pinturas, personajes conocidos de las series y películas famosas, muchas de la década de los 80. También esta Frida Kahlo, maniquíes de Batman, Spiderman, y personas de películas de terror", cuenta el emprendedor que se declara amante del arte, los tatuajes, el muralismo y las películas.

De todo para pasarla bien

El lugar se ubica cerca de más de 40 bodegas, de la zona de los boliches de Panamericana y sobre la ruta que lleva al dique Potrerillos y cuenta con bar, restaurante, cantina, alojamiento para 140 personas, piscina, canchas de futbol, vóley, quinchos, parillas, espacios verdes, playa de estacionamiento y un horno de barro.

Entre los servicios que ofrecen figuran las cabalgatas, el rafting por el río Mendoza o por una parte del dique Potrerillos, caminatas, o circuitos en bicicleta entre viñedos.

"Nosotros apuntamos a todo público. Nos visitan desde delegaciones del resto del país hasta grupos de chilenos, sobre todo en este momento. A veces llegan deportistas en grupos y muchas veces el lugar sirve de descanso para aquellos que salen de los boliches o para quienes desean ver un sunset", señala Matías, quien afirma que su hostel, por su perfil "es único en el mundo. He viajado muchísimo y no ve ninguno parecido", dijo.

Destacó que para quienes son amantes de las películas y las series, el lugar es ideal ya que por todos lados se pueden ver personajes alusivos a protagonistas de los films.

Para los que se hospedan hay un paquete que incluye desayuno y otra alternativa con pensión completa.