No es solo un cereal: sus fibras solubles, antioxidantes y micronutrientes hacen que el cuerpo funcione de manera más eficiente cuando se consume a diario.
Los increíbles beneficios de comer avena todos los días, según los expertos
La avena dejó de ser un alimento "aburrido" para convertirse en un aliado clave de desayunos y meriendas. Nutricionistas como María Casas y Juan Giménez coinciden en que este cereal no solo aporta energía: también mejora la saciedad, el metabolismo, la microbiota y hasta los niveles de colesterol.
Casas, dietista y profesora en Academia Fit Generation, explicó en una entrevista con Elle que el efecto más inmediato aparece "casi desde el primer día". Según detalla, la avena produce mayor sensación de saciedad, lo que ayuda a reducir el picoteo y controlar mejor el apetito. Este impacto está vinculado a su fibra soluble, especialmente el -glucano, uno de los componentes más estudiados.
Giménez, nutricionista de Dia, señala que la avena es "uno de los cereales más completos desde el punto de vista nutricional". Aporta fibra, proteínas, grasas, y minerales como manganeso, magnesio, hierro y zinc. Cuando el -glucano se mezcla con agua o leche, forma un gel que ralentiza la digestión, prolonga la saciedad y suaviza los picos de glucosa.
La avena favorece la microbiota gracias a su efecto prebiótico.
Los estudios también muestran que el consumo diario de avena se asocia con un menor riesgo de diabetes tipo 2 y con menor mortalidad general, gracias a su composición más equilibrada frente a otros cereales. Como resume Casas, la avena no aporta solo carbohidratos: también ofrece ácidos grasos insaturados que la vuelven más completa.
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Uno de los efectos más destacados ocurre en el intestino. El -glucano actúa como prebiótico, alimenta bacterias beneficiosas del colon y favorece la producción de ácidos grasos de cadena corta, claves para regular procesos metabólicos y la inflamación. "Nutren a las células intestinales y participan en procesos que regulan el metabolismo y la inflamación", explica Casas.
Elegir avena integral mejora la respuesta metabólica.
La avena también es el único cereal que contiene avenantramidas, compuestos antioxidantes y antiinflamatorios que ayudan a proteger las células del estrés oxidativo. Cuando se incorpora casi todos los días, la fibra soluble también colabora en modular el colesterol.
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Para obtener mejores resultados, Giménez recomienda elegirla "integral o lo menos procesada posible". Casas lo sintetiza así: "Si se come avena todos los días, el cuerpo no solo recibe menos colesterol, sino que además empieza a funcionar de forma más eficiente".
Un alimento simple, accesible y con múltiples beneficios para sumar en cualquier momento del día.
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