Un empleador reveló cuáles son las características que más seducen a las empresas que buscan incorporar a un trabajador a su equipo.
Cuatro tips para prepararse para una entrevista de trabajo
Ya sea porque perdiste tu anterior empleo o porque decidiste cambiar de rumbo, el momento de salir a buscar trabajo es uno de mucho estrés, y es natural que así sea. En ese proceso de búsqueda, lo que menos queremos es dejar libradas las cosas al azar, y más todavía si aspiramos a un puesto codiciado por otros.
Es por eso que el emprendedor y conferenciante Anxo Pérez, quien ha realizado muchas entrevistas de trabajo a aspirantes, recopiló cuatro consejos que te servirán para diferenciarte a la hora de afrontar una entrevista laboral.
Prepararse para una entrevista laboral demuestra respeto por el puesto y la empresa a la que aspiramos.
Un currículum sintético
La entrevista de trabajo no empieza en el momento en que realizás la entrevista, sino en el momento en que redactás tu CV. Y en todo currículum hay dos conjuntos de elementos: los que te hacen sumar puntos para conseguir el puesto y los que no. Incluir lo que es relevante para ese trabajo, te ayuda. Incluir lo que no, te perjudica.
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Conocer bien la empresa
No cometas el error de ir "a ciegas" a la cita laboral. Hacer siempre los deberes y averiguar todo lo que puedas sobre la empresa es lo más adecuado.
Antes de ir a la entrevista, conviene revisar el currículum y eliminar los datos innecesarios para el puesto laboral que buscamos.
Saber por qué querés trabajar en esa empresa
Una entrevista es como una cita. Las empresas quieren tener la sensación de que el candidato las quiere a ellas y no a cualquiera. Así que si quieres demostrar que te importa el trabajo y la empresa, siempre deberás tener preparada de antemano la respuesta a la pregunta «¿Por qué te gustaría trabajar aquí?».
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Preguntar poco, responder bien, escuchar mucho
Preguntar poco. Por supuesto que se puede formular preguntas, pero deberías entender tu papel: el de ser entrevistado por tus posibles empleadores y no al revés.
Responder bien. Si te preguntan «¿Por qué te interesa este puesto?», quizás la respuesta sea: «Porque necesito trabajar y me hace falta el dinero», pero esa respuesta nunca computa a tu favor. Antes de responder de forma impulsiva, deberías pensar tu respuesta y pasarla por un filtro.
Por último, escuchar mucho. Y esto no significa fingir interés, si no prestar atención a las pistas que va dejando el empleador al hablar. Pro ejemplo, si en algún momento de la entrevista el entrevistador te habla de lo mucho que necesita gente resolutiva, deberías prestar atención a esa pista y mostrarle cómo podés ser resolutivo en el trabajo.
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