Adriana Castro fue embestida por el automóvil que, haciendo marcha atrás, se incrustó en la entrada de la sala ubicada en Godoy Cruz.
El testimonio de una herida en el Teatro Plaza: "Pensé que era un atentado"
La noche del pasado domingo, un vehículo, conducido por un hombre con una discapacidad motriz, que estaba haciendo marcha atrás, se incrustó en la entrada del Teatro Plaza de Godoy Cruz y atropelló a 23 personas. Algunos de los heridos fueron aplastados por el mobiliario impactado por el coche. Los lesionados, acababan presenciar una comedia protagonizada por Soledad Silveyra y Verónica Llinás.
Adriana Castro, una de las personas que resultó embestida por el rodado, conversó con Ricardo Montacuto en el programa Te digo lo que pienso por radio Nihuil y relató su experiencia.
"Gracias a Dios estoy bien y en mi casa. Hoy están apareciendo algunos dolores, pero me hicieron todos los estudios y estoy bien. Podría haber sido peor. Soy una persona de fe y creo que hubo una mano que me salvó de la muerte. Nunca ví la muerte tan cerca. Viendo el video del accidente, soy una de las personas que fueron golpeadas por el lado del acompañante del auto. Nosotros volamos y no quedamos debajo del rodado. Creo que eso nos salvó", indicó.
Adriana Castro
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"Salimos de un hecho de tanta alegría, luego de ver una obra de teatro maravillosa, donde las actrices nos dijeron que se iban a sacar fotos con nosotros y a los minutos pasamos a presenciar un caos, como de guerra. Fue algo muy contrastante", destacó.
Castro dijo que se encontraba de espaldas al auto. "No lo vi venir porque estaba mirando hacia la puerta del teatro. Sentí que volé. Sentí un fuerte ruido y para mí era un atentado, como una bomba. Fue como algo peor que un terremoto. Luego, intenté levantarme y no pude, porque tenía gente arriba mío. Después me desmayé".
"Yo estaba con mi hijo, mi hermana y una íntima amiga. Destaco la agilidad y la perfecta diagramación de defensa civil, el servicio coordinado, bomberos y la policía para vallar rápidamente la zona y contener a los heridos. Eso estuvo bueno y lo destaco".
La mujer contó además que, según la gravedad que presentaban las personas, las iban derivando a los distintos nosocomios. "Yo nunca lo ví al conductor. Solo gente que lo rodeaba. Yo tenía mucha confusión y sé que había gente que le reclamaba de manera violenta. Vi a gente tendida, sangrando, era una imagen dantesca, como la guerra", recordó.
Finalmente remarcó: "entiendo que puede haber accidentes, pero esto fue salir sin el registro de conducir. Todos sabemos que un auto puesto en marcha es un arma. Me di cuenta más que nunca, que el presente es lo que importa. Ni un paso antes, ni uno después. Hay que aprovechar el momento, ser felices con nuestros seres queridos y poder demostrar más nuestro afecto".
Soledad Silveyra-Verónica Llinás
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