En el Día Mundial de la Diabetes, referentes locales compartieron datos y actualidad. Una "herencia" de la post pandemia, exige potenciar cuidados y prevención y hay debates sobre la legislación nacional. Claves para "derribar mitos" en la juventud y el mundo laboral.
De la escuela al trabajo: cómo vivir con diabetes en Mendoza
Este 14 de noviembre se conmemora el Día Mundial de la Diabetes, fecha establecida en honor al nacimiento de Frederick Banting, uno de los descubridores de la insulina en 1921. En Argentina, la enfermedad afecta a 1 de cada 10 adultos, y 4 de cada 10 desconocen que la padecen.
Entre los datos a destacar, un fenómeno de la post pandemia enciende alarmas. Durante años se creyó que la diabetes tipo 1 afectaba sobre todo a niños y adolescentes, y la tipo 2 solo a adultos. Si bien esta tendencia se mantiene, una serie de hábitos poco saludables -sedentarismo, exceso de pantallas y alimentación inadecuada- produjo que la diabetes tipo 2 aparezca cada vez más en menores, junto al incremento de la obesidad.
En este contexto, los especialistas subrayan que la prevención y los controles regulares son más que importantes. Para los adolescentes, los cuidados no solo incluyen los tratamientos correspondientes, la alimentación y la actividad física, sino también cómo afrontar situaciones concretas, como "la primera vez", y conocer información clave sobre cómo afrontar eventos propios la vida social, como el Último Primer Día (UPD) o el viaje de egresados.
Por otro lado, este año la conmemoración se centró en el "bienestar laboral". En ese marco, se promueven entornos de trabajo saludables, con colaciones equilibradas, alimentación adecuada y conocimiento sobre la enfermedad.
"Si trabajamos con alguien con diabetes, es importante conocer su tratamiento para acompañarlo. A veces necesita medirse la glucemia en el trabajo, y es fundamental evitar el estigma", explicó al Post Rosa Ibarra, Coordinadora del Programa Provincial de Prevención de Diabetes de Mendoza. "Si alguien sufre discriminación laboral por su diagnóstico, debe denunciarlo. En Mendoza se realizan las denuncias pertinentes desde el programa."
Debates sobre la ley
Rosa Ibarra, coordinadora del Programa Provincial de Prevención de Diabetes de Mendoza, explicó al Post: "La ley se aplica en todo el país, incluso en Mendoza. Tenemos además la Ley Provincial 6715/99, que garantiza tratamiento, atención y prevención. Desde el programa trabajamos para aggiornarnos a las necesidades de la población".
En Mendoza, hay 22.871 personas con diabetes registradas con cobertura garantizada en el sistema público sin obra social. "En diabetes tipo 2, medicación oral e insulina se entregan con cobertura del 100%. En tipo 1 se incluyen sensores, tiras para medir glucosa, insulina y agujas. Cada año debutan entre 70 y 75 niños con diabetes tipo 1", detalló Ibarra.
Si bien desde el gobierno se asegura que se cumple con la normativa en Mendoza, otros sectores advierten sobre "demoras en la entrega de insumos y cobertura de prestaciones". En esta dirección, Carina Dalmau, diabetóloga de OSEP, agregó: "El problema no es la ley, sino los tiempos. Las obras sociales se demoran, hay que hacer planes y planillas, y muchas veces los médicos hacemos malabares para que los pacientes reciban el tratamiento a tiempo".
Por su parte, Mirtha Figueroa, presidenta de ANADIM, destacó las tensiones: "La ley nacional establece que el Estado, las obras sociales y las prepagas deben garantizar todos los adelantos tecnológicos, como sensores o dispositivos. Sin embargo, la provincia a veces se desliga, diciendo que eso le corresponde a la Nación. Por eso presentamos un proyecto en la Legislatura para que se cumpla la ley".
A su vez, Figueroa destacó la importancia del trabajo territorial: "La Asociación de Niños y Adolescentes con Diabetes de Mendoza (ANADIM) tiene 22 años. Nació en los pasillos del Hospital Notti, cuando un grupo de chicos hizo su ‘debut diabético' y sus padres se organizaron para apoyarse mutuamente. Somos abuelos, papás y mamás que buscamos educar, contener y concientizar: la diabetes no limita a nadie, y aprender a convivir con ella evita complicaciones a futuro".
"La asociación trabaja ad honorem, con talleres, encuentros y convivencias en distintos departamentos de Mendoza, especialmente en los más alejados como Tupungato, Tunuyán, San Carlos y La Paz. Organizamos encuentros de dos o tres días para que chicos y jóvenes aprendan sobre alimentación y rutinas saludables, amplíen redes y derriben mitos sobre la enfermedad. Próximamente realizaremos este mes un encuentro específico para adolescentes y jóvenes, para compartir y hablar de temas que muchas veces no se abordan en la consulta".
"Nos enorgullece ver a nuestros primeros chicos hoy adultos, profesionales y padres, que llevan adelante su vida sin limitaciones. La lucha sigue en el ámbito laboral: muchas veces a quienes tienen diabetes no se les da un puesto de trabajo, y seguiremos trabajando para cambiar eso", concluyó Figueroa, quien también encabezará junto a la Asociación una actividad a partir de las 17:30 horas en la Plaza Independencia, donde se realizarán testeos y se compartirá información relevante.
Diabetes y juventud
Para los adolescentes, algunos temas siguen siendo difíciles de abordar en los consultorios, y los especialistas coinciden en la necesidad de derribar estas barreras para sumar cuidados y prevención.
En esta dirección, Rosa Ibarra explicó: "El alcohol y la insulina no se llevan bien: puede generar una hipoglucemia que ponga en riesgo la vida. La educación diabetológica es clave. Si un adolescente quiere probar alcohol, debe hacerlo con responsabilidad: en casa, acompañado y en horarios seguros. En cuanto a la sexualidad, las recomendaciones son las mismas para todos: usar métodos anticonceptivos de barrera. La diabetes no impide tener una vida sexual normal".
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En la misma dirección, la diabetóloga Carina Dalmau añadió: " El consumo de alcohol no es recomendable para pacientes medicados, ya que puede provocar hipoglucemia. Es importante que cada paciente dialogue sobre estos temas en el consultorio, sin pudor. Si la diabetes está controlada, no suele haber complicaciones".
Por su parte la nutricionista Paola Navarro, completó: "Un joven con diabetes tipo 1 que usa insulina debe prestar atención a lo que come y a la actividad física. El alcohol baja el azúcar y puede causar hipoglucemia. Si van a bailar o estarán muchas horas activos, a veces no necesitan aplicarse toda la dosis de insulina. Es importante planificar, comer antes y llevar algo para ingerir si sienten una baja".
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