Su presidente, Walter Serrano, contó que esta histórica institución de Tunuyán enfrenta enormes desafíos para subsistir en una comunidad rural que depende de ella.

Una pausa para retomar el vuelo: conocé al club La Pintada

Viernes27 Jun 2025

Periodista

En el corazón de cada comunidad humilde, hay un lugar que trasciende el deporte: un refugio, un punto de encuentro, un símbolo de esperanza. A pesar de los desafíos y las pausas que pueda enfrentar, la existencia de un club de barrio es fundamental para mantener viva la unión y el espíritu de los vecinos. El Club La Pintada, fundado en 1954, encarna esta realidad.

Ubicado en el distrito Las Pintadas, a 13 kilómetros del centro de Tunuyán, este club ha sido un faro de luz para sus habitantes. Aunque actualmente atraviesa dificultades económicas que han llevado a sus integrantes a tomar decisiones difíciles, como no participar en torneos, la firmeza de su comunidad sigue intacta.

Cada domingo, los vecinos se reúnen, no solo para disfrutar del fútbol, sino para encontrar en ese espacio un sentido de pertenencia y alegría.

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Walter Serrano, presidente del Club La Pintada, compartió la historia y la situación actual de la institución en diálogo con el Post. "El club se inauguró en 1954 y está ubicado en el distrito Las Pintadas, a 13 kilómetros del centro, en una zona rural".

Serrano explicó que su principal fuente de ingresos proviene de las entradas, aunque estas no cubren los gastos operativos. "Tenemos cerca de 10 socios. Subsistimos un poco con las entradas, pero con el fútbol no cubrimos los gastos. Este año decidimos no participar en el torneo por cuestiones económicas".

"Ahora estamos en un año sabático, sobreviviendo con ingresos de alquileres y de la cantina, además de los equipos de veteranos que vienen a jugar. También estamos tratando de conseguir algún subsidio, ya que el club tiene personalidad jurídica y escritura, lo cual se formalizó el año pasado. La escuelita de fútbol no está funcionando por el frío", explicó Serrano.

Actividades

En cuanto a las actividades del club, Serrano indicó que, por el momento, solo se dedican al fútbol, ya que la localidad es pequeña y no hay espacio para otros deportes. "Por ahora, solo nos dedicamos al fútbol, ya que es una localidad muy pequeña y no hay espacio para otros deportes como el básquet o el voleibol".

Ser presidente del club

Como presidente desde hace cuatro años, su labor implica una gran responsabilidad, manejando las recaudaciones y los arreglos necesarios para el club. "Soy presidente desde hace aproximadamente cuatro años. En los equipos de nuestra zona, el presidente debe asumir muchas responsabilidades. Tengo un tesorero, secretarias y una pequeña comisión, pero soy yo quien maneja todo durante los partidos, incluyendo las recaudaciones y los arreglos necesarios. Esa es la realidad de la presidencia en un club pequeño", comentó Serrano.

Finalmente, Walter Serrano destacó la importancia del club para la comunidad, enfatizando que es un espacio esencial para los habitantes del distrito. "Para esta comunidad, el club es esencial. Aunque yo no vivo allí, sino en Colonia La Rosa, sé que la gente no tiene muchas opciones. El domingo, no tienen nada que hacer y el club es fundamental para ellos. Es un espacio que necesitan tanto los niños como los adultos".