El Ministerio de Seguridad Nacional definió "una zona sujeta a investigación especial", en la que se impondrá la norma aprobada por el Congreso en marzo pasado.
La Ley Antimafias se aplicará por primera vez en Rosario y contra narcos
Rosario se convertirá en el laboratorio de la flamante "ley antimafia". Tal como anticipó la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, la ciudad del sur santafesino ha sido elegida para el debut de esta normativa, promulgada el pasado 9 de marzo.
La medida, ya publicada en el Boletín Oficial, faculta a las autoridades a solicitar al Poder Judicial que declare a Rosario como "zona sujeta a investigación especial", una figura jurídica novedosa que amplía el abanico de recursos para la lucha contra el crimen organizado. Entre estas nuevas herramientas se destaca la posibilidad de intervenir comunicaciones digitales, incluyendo las redes sociales.
La implementación de esta ley, que se pone en práctica por primera vez en el país, se da en un contexto donde las fuerzas federales ya operan desde diciembre de 2023 en el marco del Plan Bandera, en coordinación con la policía provincial y el Ministerio de Seguridad de Santa Fe.
Si bien las estadísticas oficiales muestran un descenso general de la violencia en la provincia, medido a través del registro de homicidios dolosos (con una reducción del 9,2% en el primer trimestre de 2025 en comparación con el mismo período del año anterior), Rosario presenta una leve excepción a esta tendencia.
En este departamento se registró un incremento del 5,7% en los homicidios respecto al trimestre anterior, aunque al contrastar con las cifras de 2023, la baja es significativa. En abril, se contabilizaron siete asesinatos en el departamento, lo que sugiere que la problemática, aunque persistente, no ha experimentado un aumento exponencial.
Sin embargo, fuentes policiales han advertido en las últimas semanas sobre un incremento en las balaceras y la aparición de crímenes selectivos, especialmente en zonas como el barrio 7 de Septiembre, donde opera una banda emergente denominada "Los Menores", con presunta influencia en la barra brava de Rosario Central.
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Pesquisas fortalecidas con nuevas herramientas
La aplicación de la "ley antimafia" busca desarticular esta nueva generación de narcos, surgida tras el encarcelamiento y aislamiento de los líderes históricos de grupos criminales como Los Monos, Esteban Alvarado, Funes y Caminos.
Germán Pugnaloni, director nacional de Prevención del Delito, destacó que "lo novedoso de la ley antimafia son las herramientas con las que podrán contar los fiscales y las fuerzas de seguridad para investigar a organizaciones criminales". Desde el Ministerio de Seguridad nacional señalan que la elección de Rosario se fundamenta en el trabajo de inteligencia criminal realizado en la ciudad durante los últimos meses.
La resolución publicada en el Boletín Oficial argumenta la aplicación de la ley en Rosario debido a la reiterada comisión de delitos graves con el objetivo de beneficiar a una organización, desplazar o aniquilar a otra, amedrentar a la población o provocar temor a las autoridades.
También se considera la necesidad de aplicar la ley cuando una organización busca controlar un territorio para cometer ilícitos o sustraerlo del control estatal, y cuando los mecanismos de cumplimiento de la ley en esa área son insuficientes.
El Ministerio de Seguridad recordó que en Rosario se han producido "hechos delictivos de extrema gravedad" que generaron una "conmoción social", impulsando al gobernador Maximiliano Pullaro a solicitar la convocatoria a un comité de crisis, como ocurrió en marzo de 2024.
Información reservada de la Dirección Nacional de Inteligencia Criminal revela la presencia en Rosario de organizaciones criminales involucradas en delitos contemplados en la "ley antimafia", que endurece las penas para quienes formen parte o colaboren con bandas narco y generen violencia, con condenas de 8 a 20 años. La nueva normativa también establece que todos los miembros de estas organizaciones serán penados por igual por el delito más grave cometido por el grupo.
Entre las herramientas innovadoras que introduce la ley se encuentra el acceso más ágil y eficiente a las comunicaciones digitales, incluyendo la interceptación de mensajes en redes sociales y plataformas virtuales. La ley también permite continuar la cadena de interceptaciones que surjan de comunicaciones previamente intervenidas, facilitando la vinculación de teléfonos y plataformas utilizadas por integrantes de un mismo clan criminal, agilizando así las investigaciones.
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