La CGT sufre un fuerte golpe político en su convocatoria al paro

Sucede que el gremio de los choferes de colectivos no adhiere a la medida de fuerza, con los cual la circulación no se verá afectada.

La CGT sufre un fuerte golpe político en su convocatoria al paro

Por: Leonardo Otamendi

 La CGT concretará mañana su tercer paro general desde la asunción de Javier Milei, en una jornada que contará con la circulación habitual de colectivos en el AMBA. "La UTA adhiere a la medida de la CGT, pero no puede parar porque está en conciliación obligatoria". De esta forma, el gremio de los choferes de colectivos no se suma a la medida de fuerza nacional de 24 horas.  Esta situación será un fuerte golpe contra la paralización total de actividades impulsada por la central obrera.

Con la adhesión de la CTA Autónoma y la CTA de los Trabajadores, la CGT realizará una nueva huelga luego de casi un año de tregua con la gestión libertaria, a la que le había concretado dos paros los días 24 de enero y 9 de mayo, casi al inicio de su llegada al poder.

Héctor Daer, de la CGT, en la marcha de los jubilados de este miércoles.

Los sindicalistas argumentaron que la medida de fuerza es por "paritarias libres, homologación de todos los Convenios Colectivos de Trabajo, aumento de emergencia para todas las jubilaciones y pensiones, actualización del bono y poner fin a la represión salvaje de la protesta social".

Para el Gobierno, en cambio, se trata puramente de un "paro político" sin "consignas claras", en medio de una coyuntura con la "menor conflictividad laboral" de los últimos tiempos, con varios gremios grandes, como Camioneros y Bancarios, que ya firmaron su acuerdo salarial.

Ver: Qué pasará con las clases en Mendoza este jueves, por el paro de la CGT

Al respecto, en los despachos de la Casa Rosada chicanearon a la CGT con el comentario de que se trata del "paro de los amigos de (Leandro) Santoro", el candidato del peronismo primer legislador porteño en las elecciones del 18 de mayo.

Imagen del paro del 9 de mayo de 2024.

La CGT buscó realizar esta medida de fuerza en el cuarto mes del año, antes de que la política ingrese de lleno en el calendario electoral, pero los libertarios salieron a vincularla a las elecciones de la Ciudad, las más cercanas a la fecha del paro de mañana.

Se espera que la central, luego de esta huelga, archive por un tiempo las medidas de fuerza para que no se mezclen con las elecciones, algo que la organización cumplió durante la anterior gestión no peronista de Mauricio Macri, al evitar que los paros tuvieran lugar en fechas cercanas a las votaciones.

  Ver: Los jubilados colmaron la Plaza San Martín con sus reclamos

En paralelo hay movimientos subterráneos en el marco de la interna entre las distintas tribus cegetistas, ya que en noviembre vence el mandato del actual triunvirato que comparten Daer, Carlos Acuña y Octavio Argüello, este último en se cargo en reemplazo de Pablo Moyano.

En la previa al paro, Daer sorprendió al anticipar que dejará su cargo al frente de la CGT cuando finalice este mandato, con lo que contradijo así las versiones que circulaban respecto de que el referente de Sanidad buscaba quedar como único conductor de la central a partir de la próxima votación de autoridades.

Esta nota habla de: