Ángel Jonatan Quiroz fue acusado este domingo como partícipe necesario del homicidio agravado por ensañamiento de César Darío Rodas, ocurrido en Guaymallén.
Imputaron a un tercer sospechoso por el hombre descuartizado en Dorrego
El crimen que conmocionó a Guaymallén suma un nuevo imputado. Este domingo 22 de junio, el Ministerio Público Fiscal (MPF) acusó formalmente a Ángel Jonatan Quiroz, de 32 años, como partícipe necesario del homicidio agravado por ensañamiento de César Darío Rodas (en la foto de portada), el hombre de 41 años que fue hallado descuartizado y calcinado en una casa de Dorrego.
Según el MPF, la imputación se basa en pruebas que ubican a Quiroz en el lugar del hecho y le atribuyen una participación directa. Aunque el acusado "no contribuyó con una conducta indispensable para producir la muerte", sí habría tenido un rol clave durante el ataque, de acuerdo a lo que informó la Justicia.
El Post ya había anticipado que buscaban a un tercer implicado que había participado de la salvaje golpiza a la víctima antes del crimen, cometido con un hacha.
El asesinato ocurrió el miércoles 18 de junio en una casa ubicada sobre la calle Adolfo Calle al 1900, donde Rodas fue golpeado brutalmente, desmembrado y luego sus restos parcialmente incinerados en una parrilla, según reconstruyó la División Homicidios.
Con esta nueva acusación, ya son tres los imputados en la causa. Días atrás, fueron formalmente acusados Adriana Valeria Suárez (40) y su pareja, Marcelo Rubén Altamirano (35).
Ambos están señalados como coautores del homicidio agravado, por haber actuado con extrema violencia y con el propósito de prolongar el sufrimiento de la víctima antes de matarla. Suárez era amiga de la víctima, y le estaba alquilando una habitación en su casa desde hacía una semana al momento del crimen.
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El motivo del ataque, según declaró Suárez tras el allanamiento, fue que una de sus hijas adolescentes le contó que Rodas había intentado abusar de ella.
Un cuarto hombre que estaba en la vivienda en el momento del allanamiento fue inicialmente detenido pero luego liberado.
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La pareja sospechada de ser coautora del crimen fue imputada por homicidio agravado por ensañamiento, que contempla la pena de prisión perpetua.



