¿Qué pasará con la feria de Ugarteche?

 La tradicional feria de Ugarteche vive horas clave en cuanto a su futuro. Los puesteros denunciaron un desalojo de Gendarmería y de la Policía el pasado domingo, este martes estuvieron en la Municipalidad de Luján y este jueves tendrán una reunión con funcionarios.

Los trabajadores quieren mantener su lugar, mientras que la comuna propuso el trasladado a un predio sobre el cual los feriantes se quejan que "no está en condiciones".

La feria funciona cada domingo y hay cerca de 3.000 puestos estables y otros 600 no permanentes. Los rubros de venta son amplios y disímiles: comida, ropa, muebles, elementos para vehículos, artesanías, electrodomésticos y herramientas.

El último domingo 19 de agosto la feria sufrió variaciones que dejaron desconcertados a los feriantes: la presencia de Gendarmería Nacional, Policía de Mendoza y Policía Vial de Luján de Cuyo no permitió el habitual armado de puestos y los trasladó hacia un predio.

Juana, una feriante que vende ropa desde hace muchísimos años, le contó al Post: "En la entrada de Ugarteche, donde está un supermercado, estaba un puesto de Policía y de Gendarmería bastante masivo. Nos dijeron que teníamos que darnos la vuelta por Agrelo, donde iba a estar otro puesto y nos iban a escoltar hasta un predio. Había tres puestos más de efectivos y nosotros no podíamos desviarnos. En definitiva... parecíamos delincuentes".

Según la trabajadora, el predio "era un desastre. Los que organizaban atendían mal a la gente, se rompieron cosas para vender. Tiene un solo baño para hombres y mujeres, no tiene agua. Es un terreno de viña que removieron la tierra y ni siquiera la mojaron. Era imposible trabajar ahí, es insalubre y es una vergüenza lo que han hecho. No está cerca de la feria, conté unas 40 cuadras, unos dos kilómetros".

La concejal lujanina Paloma Scalco, de Unidad Ciudadana, detalló al Post: "El predio no está habilitado y les cobraban cánones de $50, $100, $200 hasta $500, sin control y sin entregarles facturas. Dicen que está habilitado y no está habilitado. Muchos trabajadores accedieron porque necesitaban vender".

Ante esta situación, cien trabajadores de la feria, comerciantes de la zona y Scalco se presentaron este martes en la Municipalidad de Luján para hablar con funcionarios.

Esteban Allasino, jefe de Gabinete de Luján y uno de los presentes en la charla con los feriantes, destacó al Post que en los últimos meses la comuna avanzó en un "vínculo muy estrecho" con los trabajadores de la feria.  

"Los fuimos censando para organizarnos y que la zona esté segura para el uso de los caminos, siempre con la mirada puesta en que la feria es una fuente de trabajo y no queremos coartar esa libertad de trabajo. Queremos que la feria siga en pie", dijo en relación a las rutas provinciales 15, 16 y 86, donde se ubica.

"Queremos que todos podamos convivir como hasta la fecha, sin inconvenientes de ningún tipo, pero la situación global se ve amenazada porque estamos haciendo peatonal una ruta", transmitió.

Si bien el funcionario resaltó que no hubo nunca un accidente ni una "desgracia", "queremos que la situación sea segura para el feriante, los que viven en el entorno o los que transitan de manera casual. Necesitamos tomar acciones y medidas que tiendan a ordenar la situación. Estaba desbordada, irrestricta sobre las rutas provinciales. No son calles de barrio, sino que pasan camiones, transporte público de pasajeros y transporte de diversas mercancías. Son zonas importantes de tránsito".

Allasino contabilizó las diversas tareas en los últimos meses sobre la feria: el censo, la restricción de venta de productos irregulares y la colaboración de Policía Vial para que vehículos y personas tengan la documentación al día.

Además, afirmó que el "el predio es público y municipal, no hemos hecho cobro. Que después exista o no algún privado que haya hecho algún aprovechamiento de la situación, no lo sé. Es una variable que puede haber acontecido, pero no tenemos ninguna denuncia formal y sí comentarios de los feriantes".

Pese a esto, lo ocurrido el domingo fue sorpresivo para los trabajadores, quienes aseguraron que Gendarmería fue porque así lo pidió la Municipalidad de Luján, aunque desde la comuna negaron esta situación por no ser una competencia departamental. Desde la fuerza de seguridad, le indicaron al Post que fue una determinación del Ministerio de Seguridad para ser fuerza de auxilio en el ordenamiento del tránsito y no como parte del operativo que realizó la Policía.

Allasino agregó sobre el domingo pasado: "Si históricamente un feriante se localizaba en un puesto y le pidió que se traslade, es una incomodidad. En ningún momento ha sido con mala fe ni intención de perjudicar a nadie".

Dudas e inquietudes

Funcionarios y trabajadores quedaron en reunirse este jueves por la mañana para trabajar. El jefe de Gabinete dijo que habrá "mesas de trabajos, desplegaremos planos, queremos resolver inquietudes técnicas y específicas y no quedarnos en la catarsis", además de haber "relevado terrenos con técnicos municipales, en la vieja feria municipal y otros espacios para readaptarse para el uso de los feriantes, respetando la necesidad de trabajo pero con orden".

Juana, quien será una de las que participará de las reuniones, no es optimista: "Estoy bastante nerviosa. Mañana no vamos a tener muy buenas noticias. He recibido datos que están midiendo otros predios y están listos para instalar los puestos, que la feria no va a volver a su lugar".

"Se van a cerrar muchos comercios porque la feria es el alma de Ugarteche, lleva décadas. La feria se va y Ugarteche va a buscar otras alternativas en otros lados y va a quedar la gente del lugar", reconoció.

La trabajadora expresó que quieren seguir trabajando en el mismo lugar y que "hace un tiempo pidieron despejar el lado de la ruta de puesto, nada de nada. Inclusive, nosotros mismos, les decíamos a las personas que no se podían poner ahí. Se puede tener un reordenamiento, es cosa de organizarse. Les planteé un distintivo de los puesteros, por si viene alguien de afuera y se acomoda mal en algún lado, nosotros mismos mantener el orden".

"Yo llevo mi bolsa de residuos y no dejo que se tire ni una bolsita de té en el piso. Todos planteamos hacer lo mismo. Si un vecino no lo hace, sacamos fotos y lo subimos al grupo de WhatsApp. Hemos planteado muchas cosas para seguir en el mismo lugar, inclusive cooperar todos los de la feria para poner una malla donde quieran para no estar con el mismo problema", agregó.