A pesar de que gran parte del fuego está controlado, hay preocupación por algunos focos.
Sigue el alerta por los incendios en el sur de Mendoza
Los incendios en San Rafael y General Alvear están controlados pero hay focos que siguen en actividad y que mantiene el alerta. La preocupación de Guillermo Ferraris, coordinador del Plan Provincial de Manejo de Fuego, pasa por el cansancio del personal.
“La tormenta del otro día generó otro foco de incendio en Soitue, San Rafael. Todo el personal que llegó fue para hacer un relevo de las cuadrillas en el incendio grande, que tiene una superficie de más de 140 mil hectáreas y tiene casi 200 personas entre brigadistas y colaboradores”, dijo el titular en Radio Mitre.
Y agregó que “venía un grupo de bomberos para sacar a nuestra gente a descansar, porque no han parado ni un día, duermen dos o tres horas por día en el mismo campo, el desgaste es grande. Este personal que llegó para el relevo se le asignó el incendio de Soitue, decidimos dejar al personal degastado en el incendio grande porque conocen los lugares, la maquinaria designada”.
El fuego no da tregua.
Farraris reconoció que “el incendio de Soitue estará bastante complicado. Me acaba de comentar un productor que tiene un frente grande y lleva más de 1.800, 2 mil hectáreas consumidas. Estamos tratando de ver como lo terminamos de cerrar”.
La Ruta 171 está liberada, aunque hay que tener en cuenta que a veces la cortan dos o tres veces por día como forma de prevención, dado porque el humo de los incendios llega al camino y quieren evitar los accidentes.
Hasta el momento, los diferentes organismos que están trabajando en el lugar no han registrado víctimas. En este aspecto, el personal que intenta controlar el fuego es el que tiene más experiencia para paliar el comportamiento “extremo y errático” de las llamas.
No se han registrado víctimas por los incendios.
Al ser consultado sobre si se espera que llueva, Ferraris mencionó que “llovió a 3 kilómetros del incendio, no cayó una sola gota y encima me generó otro incendio que vamos a tener que salir a cubrir luego de terminar este gran incendio. Prefiero apagar el incendio con condiciones extremas, con lo difícil que es y no tener posibilidad de lluvia y me esté generando por rayos dos o tres focos más”.
“La naturaleza no nos está ayudando. La carga de combustible en los campos es muy elevada y estos días con 40 grados, humedad inferior al 10% y vientos, ayer tuvimos viento de 30 kilómetros por hora durante tres horas y media hizo que el fuego saltara todas las líneas de defensa, todo lo que se había planificado”, se lamentó.
"La naturaleza no nos está ayudando", dijo Ferraris.
La mayor preocupación del titular pasa por el personal que está en el lugar: “Son 12 días y la parte buena es que hemos logrado frenar el avance de un incendio que tiene más de 420 kilómetros de perímetro y ya tenemos casi el 97% del incendio contenido. Pero para ese 3% que está quedando, tenemos el personal tan cansado, las máquinas que se están resintiendo por el trabajo de 24 horas, se empiezan a sumar problemas externos, que en situaciones normales lo que nos está quedando sería un incendio muy pequeño pero estamos con las últimas fuerzas”.
