Funcionarios de nuestra provincia aseguraron que necesitan plata de la Nación para poder otorgar el extra.
Gobernadores e intendentes temen no poder pagar el bono de fin de año
Los caciques y gobernadores de todo el país consideran un derrame negativo en sus finanzas la posibilidad de otorgar a los empleados públicos un bono a fin de año.
Cornejo rechazó muchas veces reabrir las paritarias en la provincia.
Si los estatales de la Nación consiguen una mejora -que puede ir desde los mil a cuatro mil pesos- los empleados dependientes de cada provincia y municipio del país también reclamarán su parte. Ante esto, los gobernadores e intendentes aseguran que sus cajas están agotadas.
La semana pasada, cinco ministros nacionales y los peces gordos de la CGT quedaron de acuerdo en proponer, tanto a empresarios como al sector público, un bono de fin de año a cambio de no reabrir paritarias.
Según informó diario Clarín, las provincias están en alerta y especialmente desde Mendoza los funcionarios aseguraron no han teniendo tiempo de analizar la posibilidad de implementar este mecanismo en la provincia por estar trabajando en el presupuesto 2017.
Ver también: ¿De cuánto sería el bono de fin de año?
“La situación en Mendoza es complicada y el gobierno no está en condiciones de otorgar un bono de fin de año a sus empleados”, dijo a al matutino un funcionario de confianza de Cornejo. En otras palabras: si la Rosada no envía fondos, Mendoza no podría otorgar un extra. En reiteradas oportunidades, Cornejo rechazó el pedido de los gremios de reabrir paritarias.