El tesoro de Llancanelo empezó a dar petróleo todos los días

Es explotación de petróleo no convencional. Ya tiene producción continua. Ayer, estuvo el nuevo presidente de YPF en Mendoza.

El tesoro de Llancanelo empezó a dar petróleo todos los días

Por: Mendoza Post

Dicen los que saben de industria petrolera que una producción de 1.300 barriles de crudo pesado diarios no es aún como para descorchar espumantes. Pero el panorama es distinto cuando esa producción es continua, y cuando se abre una ventana de mayor producción. Ayer estuvo en Mendoza el nuevo presidente de YPF, Miguel Ángel Gutiérrez, repasando con el gobernador Alfredo Cornejo una larga agenda de temas pendientes entre la petrolera estatal y el gobierno de la provincia, en lo que había de todo: desde pedidos de la provincia para que YPF busque socios menores para áreas marginales fuera de su escala, hasta los índices de producción, y una plan de desarrollo sustentable para Malargüe con financiamiento del BID.

Gutiérrez es el presidente de YPF que reemplazó a Miguel Galuccio. Viene del mundo financiero y las comunicaciones, y está en “gira política” para reunirse con gobernadores de provincias petroleras. A Mendoza vino ayer a hacer una “devolución”, luego de una primera reunión que hubo con Cornejo meses atrás.

Entre los temas que repasaron, estuvo la explotación de “crudo pesado” en la zona de Llancanelo, una explotación sensible con muchos conflictos ambientales en la década del noventa, hasta que fue encaminada. Hoy ese yacimiento produce 1.300 barriles diarios, y es el único “no convencional”. Distinto del de Vaca Muerta, y se extrae también con métodos diferentes al tradicional. 

Parte d euna instalación en Llancanelo.

El crudo de Llancanelo es casi sólido, y debe calentarse antes de poder ser extraído. YPF busca extender el horizonte de explotación de ese petróleo con nuevas inversiones, y mandar todo ese crudo a refinería una vez que se llegue al equilibrio comercial. Eso, obvio significará más regalías para Mendoza. A futuro, Llancanelo es el asunto estratégico importante para la petrolera en Mendoza.

En la agenda entre Gutiérrez y Cornejo hubo índices de producción en la provincia, la situación de áreas marginales, y pasivos ambientales pendientes. Por eso, además de Cornejo y Gutiérrez estuvieron Enrique Vaquié y Humberto Mingorance.

También hablaron de la puesta en marcha de la planta de almacenaje en Malargüe, incendiada en 2014. Será una de las plantas de tratamiento de crudo “más modernas de la Argentina, que permitirá reemplazar la planta Divisadero que sufrió un siniestro en 2014. Esta obra requirió una inversión de alrededor de 850 millones de pesos y dos años y medio de construcción. El nuevo diseño de la planta no contiene grandes tanques, lo que permite aumentar la seguridad operativa” dijo YPF en un comunicado. 

Plan para Malargüe

Gutiérrez y Cornejo cerraron la reunión con la firma de un convenio con el Intendente de Malargüe, Jorge Vergara Martínez, representado ayer por su Secretario de Hacienda y Desarrollo Económico, Jorge Tieppo. Malargüe se suma de esta manera al programa de Ciudades Sostenibles que desarrolla YPF junto al Banco Interamericano de Desarrollo (BID). Se trata del desarrollo de un plan estratégico de obras de desarrollo y crecimiento –hídricas, viales, urbanas- que sirven para que las ciudades de menos de 30.000 habitantes acompañen el crecimiento de la explotación petrolera con infraestructura.

La firma del acuerdo para Malargüe.

“Desde la Fundación YPF trabajamos para crear valor compartido en las comunidades en dónde operamos. Por eso es una gran satisfacción poder compartir con el Gobernador el lanzamiento de este Programa para Malargüe que permitirá articular un conjunto de políticas públicas que contribuyan con el desarrollo sostenible de la ciudad”, afirmó Gutiérrez.

La iniciativa se compone de dos etapas. En una primera, se desarrollan los programas estratégicos que son el resultado de charlas con todos los actores (autoridades, instituciones locales y académicas, comerciantes locales, ciudadanos) y del trabajo de expertos en medio ambiente, urbanismo, recursos hídricos, salud, educación, entre otras áreas. En la segunda etapa, se ejecutan las políticas acordadas que se financian con el aporte de organismos públicos nacionales y el sector privado. En este caso, del BID y la Fundación YPF. Añelo en Neuquén y Las Heras en Santa Cruz ya tienen este programa.