Sacó un sobresaliente por escribir un ensayo con tinta invisible

¿Cómo lo hizo?

Sacó un sobresaliente por escribir un ensayo con tinta invisible

Por: Mendoza Post

 Cuando Eimi Haga le entregó a su profesor de historia ninja la tarea que le había mandado le dejó sin palabras: era un papel en blanco, sin nada escrito en él... al menos a primera vista.

Sin embargo, la joven estudiante japonesa sacó un sobresaliente gracias a su creatividad y a su agudeza mental. En realidad, aquel trabajo no estaba en blanco; había sido escrito con tinta invisible.

¿Cómo lo hizo?

Eimi Haga, de 19 años, aplicó una técnica ninja llamada "aburidashi". Se trata de una técnica que permite escribir con una tinta que se hace visible cuando se le aplica calor. Para lograrlo estuvo horas remojando, triturando y exprimiendofrijoles de soja, que se emplean para crear esa tinta.

Después de concentrarse durante dos horas y pensar bien lo que iba a escribir, dibujó las letras sobre un "washi" (un papel tradicional japonés), con ayuda de un pincel fino. Una vez que las palabras se secaron, se volvieron invisibles.

Pero para asegurarse de que su profesor no tiraba el ensayo a la papelera, le dejó una nota -esta vez en tinta visible- dándole la pista que necesitaba: "calienta el papel". Las palabras fueron apareciendo a medida que el profesor calentaba el papel sobre su estufa de gas.

"Fue algo que aprendí de un libro cuando era pequeña", le contó Eimi a la BBC. "¡Solo esperaba que a nadie más se le ocurriera la misma idea!".

"Cuando el profesor dijo en clase que valoraría mucho la creatividad, decidí que haría que mi ensayo sobresaliera de los demás", explica. "Lo pensé durante un rato y se me ocurrió la idea del 'aburidashi'".

El profesor de Eimi, Yuji Yamada, le dijo a la BBC que se quedó "sorprendido" cuando vio el ensayo. "Había visto muchos textos escritos en código, pero nunca uno en aburidashi", explicó.

"A decir verdad, tuve alguna duda de si las letras se verían claramente. Pero cuando efectivamente calenté el papel sobre la estufa en mi casa, las palabras aparecieron muy claras y pensé: '¡Bien hecho!'"

"No dudé en darle al trabajo la máxima puntuación, pese a que no lo leí hasta el final porque pensé en no calentar algunas partes del papel en caso de que los medios se interesaran por esto... y saqué una foto".

En cuanto al ensayo en cuestión, la propia Eimi dijo que tenía más estilo que sustancia.

"Estaba segura de que el profesor reconocería al menos mis esfuerzos por hacer un ensayo creativo", explicó. "Por eso no me preocupaba realmente sacar una mala nota por mi ensayo, aunque el contenido en sí no fuera tan especial", dijo.