Rosca de Pascua para hacer bien casera

La podes hacer en casa sin gastar de más con esta simple receta.

Rosca de Pascua para hacer bien casera

La rosca de Pascua es una de las recetas más tradicionales en esta época del año, por esto es que es una gran oportunidad para aprender a cocinarla en casa. ¡Manos a la masa!

Para esta exquisita rosca necesitas:

Fermento

Harina 000, 125grs.

Levadura fresca, 15grs.

Miel, 20grs.

Leche tibia, 100cc.

Masa

Manteca a temperatura ambiente, 100grs.

Levadura de cerveza fresca, 30grs

Ralladura de un limón.

Leche, 80cc.

Azúcar, 100grs.

Huevos 2 Unidades

Esencia de vainilla, 1cda.

Fermento previo

Sal 5grs.

Harina 000, 400grs.

Preparación:

Para el fermento, llevas a un bol la leche tibia con la harina, la levadura fresca y la miel.

Mezclas y dejas descansar esta masa por 25 minutos.

Para la masa, llevamos a un bol la harina, el azúcar, la levadura de cerveza fresca y perfumas con 1 cucharada de esencia de vainilla y la ralladura de limón.

Agregas los huevos, la leche y el fermento previamente realizado.

Trabajas la masa amasando y cuando se vaya formando el bollo incorporas la sal fina.

Integras bien todo y añadís la manteca a temperatura ambiente.

Cuando la masa esté unida y mientras se continúa trabajando, espolvorear con harina.

Retiras del bol y trabajas con las manos en la mesada hasta poder formar un bollo liso.

Dejamos levar en bol tapado durante 40 minutos.

Luego, retiras, aplastas y haces un hueco en el centro y con las manos formamos una rosca.

Llevamos a una placa, aplastas y dejas descansar durante 20 minutos tapada.

Un poco de tradición e historia:

La rosca de pascua es un tipo de pan dulce tradicional en forma de anillo, que por lo general se acostumbre a preparar en pascuas.

Tiene un origen muy antiguo e incluso pagano ya que en su época en Roma se le agradecía a la tierra por su generosidad y riquezas en alimentos. Para aquel momento se acostumbraba a elaborar una torta de higos, dátiles y miel, de forma redonda como ofrenda en espera de fertilidad y buenas cosechas para el año que iniciaba.

No obstante, fue en Italia donde se comenzó a hacer la rosca de Pascua de manera muy similar a como la conocemos en la actualidad. Los pasteleros italianos retomaron la tradición pagana a fin de rivalizar con la usanza del Huevo de Pascua como símbolo de nacimiento y fertilidad.

Asimismo, la forma de anillo de la rosca de Pascua representa la continuidad, la unión y el renacer eterno, que se vincula con la celebración cristiana de la resurrección de Jesucristo el día de Pascua.

Para la elaboración de la rosca de Pascua los pasteleros emplearon tres productos básicos en la pastelería que son leche, harina y huevos, y para su decoración empleaban huevos duros.

Ahora bien, la historia se remonta al año 476, cuando un rey bárbaro había ocupado la ciudad de Paiva, en Italia. En esa ocasión un pastelero elaboró una torta con forma de paloma como símbolo de paz y amor para el rey, el cual quedó asombrado y, como prueba de su amistad ordenó la liberación del pueblo.

A partir de ese entonces se comenzó a elaborar la rosca de Pascua, hasta llegar a la que se conoce actualmente, como representación del amor y la amistad que une a los pueblos.

Así fue como la tradición de la rosca de Pascua se extendió a diversos territorios y pueblos en los cuales puede recibir un nombre en particular y su decoración y receta varía pero, su simbología se mantiene, la celebración del renacer de Jesucristo.

En Argentina, por su parte, la rosca de Pascua está muy arraigada entre las costumbres culinarias de la festividad cristiana. Es muy parecida, en este sentido, a la rosca de Reyes.