Las recomendaciones del astrónomo experto Guillermo Abramson para no perder ninguna estrella.
Cómo ver mejor la lluvia de estrellas esta noche en Mendoza
La lluvia de estrellas de las Gemínidas que podrá verse esta noche fue descubierta en el año 1862 y cada diciembre provoca un espectáculo mundial, pero para tener recompensa hay que tener paciencia.
Según comentó al Post el doctor Guillermo Abramson(*), es importante esperar un buen tiempo antes de darse por vencidos sino se logra divisar alguna estrella cayendo: "No es cuestión de salir 15 minutos y sino vi nada me voy a dormir. Hay que empezar a observar a la medianoche durante unas dos horas".
También recomendó: "No se debe usar el celular o ver directamente hacia la luz, como luces de calles o de los autos. La vista demora media hora en acostumbrarse a la oscuridad y si se ve una luz directamente se pierde en un minuto".
No uses el celular mientras intentás observar.
Advirtió que es un fenómeno muy bueno para observarlo en el hemisferio Sur y destacó que sería muy bueno dirigirse a un lugar lejos de la Ciudad por la luz, la zona montañosa sería lo mejor aunque puede verse en zonas suburbanas también.
Resaltó que es mejor sentarse en una reposera mirando hacia el norte o el nordeste pero no al horizonte sino hacia la mitad del cielo. Por último afirmó que es mejor sentarse con alguien a verlo porque pueden mirar para distintos ángulos y es más entretenido.
Por último comentó que estas estrellas "tienen un origen curioso, se originan de las colas de los cometas, de los gases, polvo y arena que dejan cuando se acercan al sol y empiezan a evaporarse. Lo que brilla son las partículas que golpean contra la atmósfera, a 30 km de la tierra. No está cayendo nada, sino golpeando contra la tierra".
Lo mejor es dirigirse a un lugar alejado de la Ciudad.
"Se generan de un asteroide Faetón, que tiene doble personalidad porque es un cometa, deja meteoros como si fuera un cometa, pero tiene la composición de un asteroide", concluyó y resaltó el papel del Observatorio Pierre Auger en su labor por estudiar estas partículas que chocan contra la tierra.
(*) Centro Atómico Bariloche, investigador del CONICET y profesor del Instituto Balseiro.
