Con ayuda de Estados Unidos, Holanda, y funcionarios del propio régimen chavista, la opositora venezolana logró llegar a Noruega para recibir el Premo Nobel de Paz.
Así fue el megaoperativo para la extracción de María Corina de Venezuela
Con ayuda de Estados Unidos, Holanda, y funcionarios del propio régimen chavista, la opositora venezolana logró llegar a Noruega para recibir el Premo Nobel de Paz.
María Corina Machado logró salir de Venezuela y llegar a Oslo, Noruega, donde este jueves recibió oficialmente el Premio Nobel de la Paz 2025. La operación -ejecutada el martes 9 de diciembre y mantenida en estricta reserva durante más de 48 horas- involucró a la CIA, a sectores de la inteligencia venezolana y a un impresionante despliegue militar de Estados Unidos.
La extracción puso fin a meses de vida clandestina para la dirigente opositora, perseguida por el régimen de Nicolás Maduro desde las elecciones de 2024. Durante su primera conferencia pública tras la llegada a Europa, Machado confirmó que recibió apoyo del gobierno estadounidense y agradeció el "esfuerzo de hombres y mujeres que arriesgaron sus vidas" para sacarla del país.
Un operativo en sombras, con aliados dentro del régimen
El plan comenzó en un punto indeterminado del estado Falcón, adonde un equipo de la CIA trasladó sigilosamente a Machado desde su escondite. El recorrido -hecho por rutas secundarias y bajo estrictas medidas de contravigilancia- fue posible gracias a la cooperación de funcionarios de inteligencia del propio aparato chavista.
Algunos de estos agentes habían colaborado meses atrás en la llamada "Operación Guacamaya", que logró evacuar a cinco opositores refugiados en la Embajada de Argentina en Caracas. Esta vez repitieron tácticas: búsquedas simuladas, difusión de pistas falsas y movimientos controlados para confundir a las unidades más agresivas del régimen.
Paralelamente, la CIA empleó un esquema de compartimentación extrema: distintos grupos manejaban rutas y puntos de salida separados, sin saber cuál era el verdadero. Tres salidas marítimas fueron puestas en marcha -dos ficticias en Puerto Cabello y Ocumare de la Costa, y una real en Falcón- sin que nadie, salvo un reducido número de operadores, conociera la opción definitiva.
Cuando Machado llegó a la playa designada, un equipo de la Marina de Estados Unidos la esperaba a bordo de una embarcación militar. En ese momento, el operativo escaló al nivel máximo.
Cazas F-18 desplegados desde el portaaviones USS Gerald Ford sobrevolaron el corredor marítimo entre Venezuela y Aruba, mientras un dron de reconocimiento -conocido primero como Black Cat y rebautizado después como "Siete Estrellas"- monitoreaba cualquier amenaza aérea o naval.
"Golfo de Venezuela" es tendencia porque 2 aviones de combate F-18, de la Fuerza Aérea de Estados Unidos, entraron al espacio aéreo de Venezuela, y dieron varias vueltas entre Maracaibo y Punto Fijo. pic.twitter.com/moF4WPXAyI
La orden de proteger la extracción "a cualquier costo" fue firmada por el secretario de Defensa, Pete Hegseth, con la aprobación del presidente Donald Trump. Según fuentes periodísticas, los pilotos tenían instrucciones explícitas de derribar cualquier aeronave venezolana que intentara interferir.
Un rescate en altamar y la intervención holandesa
Las condiciones meteorológicas encendieron alarmas: oleaje alto y vientos fuertes complicaron el avance hacia Curazao. Ante el riesgo creciente, un helicóptero de la armada holandesa -identificado como Silverback- se sumó a la operación y ejecutó un traspaso en plena altamar.
En un descenso casi a ras del océano, los pilotos estabilizaron la aeronave lo suficiente para que Machado pudiera ascender por una escalera metálica, equipada con un chaleco salvavidas y un pequeño bolso.
Desde allí fue trasladada a la base militar norteamericana en Willemstad, donde recibió asistencia médica por mareos y agotamiento producto de la tensión y el mal clima. Su viaje inmediato a Oslo fue pospuesto por recomendación de los médicos y confirmado ante el Comité del Nobel.
La llegada de Machado a la capital noruega se produjo en la madrugada del jueves, bajo un dispositivo de seguridad reforzado y un clima de expectación entre exiliados venezolanos y diplomáticos de Argentina, Panamá, Ecuador y Paraguay.
Machado, ya recuperada y aún bajo protección internacional, expresó su voluntad de regresar a Venezuela "cuando existan condiciones propicias en términos de seguridad".
El incidente ocurrió en Queensland, Australia, cuando el paracaídas de reserva se abrió antes de tiempo y se enganchó en el avión. El deportista logró liberarse cortando las líneas y aterrizó con lesiones leves.
Denunciaron que Migraciones les confiscó los pasaportes, los fotografió y los obligó a embarcar hacia Bolivia sin explicar los motivos. El canal acusó al Gobierno de Maduro de un acto de censura.