En las Huayquerías del Este, científicos encontraron más de 1.800 restos fósiles que permiten conocer cómo era la vida al pie de los Andes hace millones de años.
El desierto mendocino que guarda secretos de millones de años
En medio del paisaje árido del sur mendocino, Las Huayquerías del Este, en el departamento de San Carlos, conservan un secreto que recién ahora empieza a conocerse: allí vivieron animales gigantes y especies hoy extinguidas hace entre 8 y 3 millones de años.
Un trabajo científico de más de una década, liderado por especialistas del CONICET, permitió reconstruir cómo eran aquellos ambientes y quiénes los habitaban. Los investigadores reunieron más de 1.800 restos fósiles y registraron unas 60 especies extintas, aportando nuevos datos sobre la historia natural del oeste argentino.
El equipo estuvo encabezado por Analía Forasiepi, del IANIGLA (CONICET-UNCuyo-Gobierno de Mendoza), junto al científico Francisco Prevosti, de la Universidad Nacional de La Rioja. También participó el becario Cristo O. Romano Muñoz, autor principal de un estudio publicado en la revista Papers in Palaeontology.
Los fósiles recuperados pertenecen principalmente a mamíferos, aunque también se encontraron restos de aves, reptiles y anfibios. "Un viaje al pasado nos habría dejado atónitos por lo inusual de algunos de estos animales", explicó Forasiepi, al destacar que muchos de ellos no tienen representantes actuales.
Entre los descubrimientos más llamativos figuran restos de un gliptodonte, un enorme animal acorazado emparentado con los armadillos; cráneos y huesos de perezosos terrestres gigantes; y diferentes tipos de ungulados nativos hoy extinguidos, parecidos en hábitos a caballos, ciervos o tapires.
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También se identificaron fósiles de prociónidos, animales emparentados con los mapaches. Según Prevosti, estos registros, de unos 5 millones de años, muestran uno de los primeros movimientos de animales entre América del Norte y del Sur, incluso antes de la formación definitiva del Istmo de Panamá.
Entre los hallazgos no mamíferos se destaca la presencia de la tortuga del Chaco (Chelonoidis chilensis) en sedimentos de 6,3 millones de años, el registro más antiguo conocido para esta especie actual. Además, se descubrió un escuerzo único: Lepidobatrachus dibumartinez, un anfibio bautizado en homenaje al arquero argentino Emiliano "Dibu" Martínez.
Los científicos también encontraron huellas fósiles preservadas en antiguas superficies de barro endurecido. Se identificaron rastros de al menos cinco especies diferentes, entre ellas perezosos gigantes y ungulados.
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Desde el punto de vista geológico, las Huayquerías muestran depósitos formados por ríos, abanicos aluviales y dunas, un paisaje muy parecido al actual. Para el geólogo Alberto C. Garrido, los datos indican que hace unos 7 millones de años Mendoza ya presentaba condiciones áridas o semiáridas, producto del crecimiento de la Cordillera de los Andes, que generó la conocida "sombra orográfica".
Por último, Romano Muñoz explicó que los estudios permitieron redefinir una etapa del tiempo geológico sudamericano, conocida como el Huayqueriense, que abarca entre 8 y 5 millones de años, justamente en referencia a las Huayquerías del Este, donde se definió por primera vez.
Las investigaciones contaron además con el apoyo de la Dirección de Patrimonio Cultural y Museos de Mendoza, organismo que protege el patrimonio fósil provincial y autorizó las tareas en el terreno.
Hoy, ese tranquilo sector del sur mendocino se confirma como uno de los lugares clave para entender cómo fueron los ecosistemas que dieron forma al paisaje árido que todavía domina la región.



