Con ingredientes básicos y una técnica sencilla, miles de usuarios aseguran que se puede mantener este electrodoméstico libre de grasa y en buen funcionamiento.
El truco casero para limpiar la campana extractora sin esfuerzo
La limpieza de la cocina es una de las tareas más recurrentes en los hogares argentinos, pero pocas zonas resultan tan difíciles de higienizar como la campana extractora. Este dispositivo, esencial para absorber olores y vapores, suele acumular grasa con rapidez, lo que genera complicaciones no solo estéticas, sino también de funcionamiento.
En las últimas semanas, un truco compartido en redes sociales por la creadora de contenido española Ana Tuñón -con más de 200 mil seguidores en Instagram- cobró notoriedad en distintos países, incluido en este país. El método consiste en llenar una olla con agua, agregar dos gotas de jugo de limón y una taza de bicarbonato de sodio, colocarla en el fuego y encender la campana a máxima potencia tras retirar los filtros. El vapor generado, según se indica, actúa durante aproximadamente una hora y facilita que la grasa se desprenda casi por completo, permitiendo su posterior limpieza con un paño húmedo o desengrasante común.
De hecho, la influencer no es la única que pone en práctica este método. Un par de internautas que vieron el vídeo confesaron que han estado utilizándolo desde hace bastante tiempo. "Lo llevo haciendo años y es súper efectivo", decía una usuaria, mientras que otra explicaba que "lo hago con vinagre y también queda muy limpia".
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También sirve para la limpieza de la bandeja de horno
El bicarbonato de sodio, utilizado en este truco, es uno de los productos más versátiles en el ámbito de la limpieza. Además de la campana, se lo aplica en superficies como bandejas de horno, azulejos o fregaderos. Una de las técnicas más recomendadas para el horno consiste en cubrir la bandeja con una mezcla de bicarbonato y vinagre blanco, dejar reposar durante la noche y enjuagar al día siguiente, logrando remover restos de comida incrustada sin esfuerzo excesivo.
En un contexto donde proliferan tutoriales y consejos de limpieza en plataformas digitales, el éxito de este método responde a dos factores clave: simplicidad y accesibilidad. Los ingredientes necesarios suelen estar presentes en cualquier cocina, y el procedimiento evita el uso de productos químicos agresivos o largas horas de frotado.
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