La noche del lunes no se salvó nadie en la casa de Gran Hermano por Telefe. Tras el anuncio de Santiago del Moro de que todo iba a cambiar con dos sobres negros en mano, la producción cumplió la promesa. Y la casa volvió a ponerse patas para arriba.
Los jugadores habían recibido un reto por parte del conductor del reality, que por más cuestionado que sea, sigue siendo el programa de mayor rating en la televisión argentina. "Esto no es un hotel cinco estrellas", les dijo Del Moro durante la última gala de eliminación, donde abandonó el juego Florencia.
Este lunes, el Big cambió todo. Tras hacer sonar el teléfono rojo, al que corrió el azafato Joel para atenderlo, se convocó a todos los jugadores al living y fue el momento en que uno por uno recibió la noticia de que estaban nominados.
"El juego cambió. Se los advertí", les dijo del Moro que con los sobres negros en mano prometía más novedades. Y en verdad las hubo.
Esta vez habrá voto positivo, desde afuera y adentro de la casa. Pero además serán dos las galas de eliminación. El domingo y el lunes.
Telefe anunció entonces que ahora "el juego está en manos del público aunque con una diferencia: esta vez el voto no es negativo, es positivo, así que la gente debe votar por quién quiere que se quede en la casa, no por el que la abandone.
EL JUEGO CAMBIO %uD83D%uDD25 Sonó el teléfono rojo y todos los jugadores quedaron nominados %uD83D%uDE31
ATENCIÓN, esta semana el voto es positivo: vos elegís QUIÉN QUERÉS QUE SE QUEDE EN LA CASA%u2705
Este martes 23 habrá una nueva prueba del líder y el ganador saldrá de la placa de nominados. Luego se producirá una nueva gala de nominación, durante la noche del miércoles 24, "pero también teniendo en cuenta las diferencias de esta semana: en vez de votar por quiénes quieren que se vayan de la casa, los jugadores votarán para que tres compañeros salgan de la placa de nominados", se informó desde el programa.