UNICEF destacó que la pobreza infantil bajó casi 6 puntos en un año. A pesar de destacar la mejora, el organismo alertó que millones de chicos siguen sin acceder a condiciones básicas.
Bajó la pobreza infantil en Argentina, pero persisten fuertes desigualdades
Un informe reciente de UNICEF reveló que la pobreza infantil en Argentina bajó al 52,7% en el segundo semestre de 2024, una mejora significativa respecto del 58,5% del mismo período del año anterior. Sin embargo, el organismo internacional advirtió que persisten desigualdades profundas que afectan especialmente a los niños de hogares más vulnerables.
Entre las cifras más alentadoras, el reporte detalla que en comparación con el primer semestre de 2024, la pobreza infantil cayó 14 puntos porcentuales, lo que equivale a 1,7 millones de chicos menos en situación de pobreza. Frente al mismo período de 2023, la mejora fue de 6 puntos, es decir, 800 mil niños.
Es decir que, traduciendo los datos políticamente, al comienzo del gobierno de Javier Milei, la pobreza infantil subió considerablemente, aunque al final de su primer año la misma ya era menor a la que había dejado la administración de Alberto Fernández.
La educación de los adultos del hogar influye fuertemente en la pobreza infantil, según destacó UNICEF.
"Las transferencias monetarias -como la Asignación Universal por Hijo y programas similares- juegan un papel clave en la contención de la pobreza extrema. Sin ellas, la tasa de indigencia en la niñez sería 10 puntos más alta", señaló Rafael Ramírez Mesec, representante de UNICEF en Argentina.
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Según los datos oficiales del INDEC y el análisis de UNICEF, la mejora se debe a una recuperación parcial de los ingresos en los hogares, sumado al impacto de los programas sociales.
Pese a esta mejora, las brechas siguen siendo alarmantes. Unicef citó las siguientes:
-En hogares donde el jefe o jefa no completó la primaria, el 80,9% de los niños son pobres.
-En barrios populares, el 72,3% de los chicos vive en la pobreza.
-En hogares monoparentales encabezados por mujeres, el índice alcanza al 60%.
Más de 1 millón de niños evitaron la indigencia gracias a la Asignación Universal por Hijo (AUH), de acuerdo al informe.
-Cuando el jefe de hogar trabaja en la informalidad, la pobreza infantil llega al 68,4%.
-En contraste, en hogares donde el adulto referente completó la secundaria, la pobreza infantil cae al 10,6%.
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"Junto con la desaceleración inflacionaria, las políticas de protección social para la infancia resultaron fundamentales para la reducción de la pobreza", destacó Sebastián Waisgrais, Especialista en Monitoreo de UNICEF.
El informe también analizó el presupuesto nacional destinado a la niñez, que creció un 15% en términos reales en los primeros cinco meses de 2025 respecto del mismo período de 2024, impulsado principalmente por el aumento en programas como la Asignación Universal por Hijo (AUH), que subió un 34%.
Sin embargo, el gasto en otras áreas clave cayó:
-Las becas escolares bajaron un 35%.
-El presupuesto en salud para niños cayó 21%.
-El Plan Nacional de Primera Infancia se redujo a la mitad.
Ramírez advirtió: "La estructura federal del país requiere profundizar en el análisis del gasto público consolidado entre nación y provincias, para valorar su magnitud y eficiencia".
Además de la pobreza por ingresos, el informe también examinó las privaciones no monetarias, como acceso a vivienda digna, educación, servicios de salud y hábitat. A diferencia de la pobreza monetaria, estas privaciones no mejoran con ciclos económicos favorables, sino que requieren políticas públicas estructurales y sostenidas en el tiempo. "El análisis de estas privaciones permite informar estrategias para mejorar el bienestar de niñas y niños en el país", cerró Ramírez.
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