El 93% del saldo de créditos por ventas de IMPSA se deriva de sus contratos con Corpoelec, la estatal venezolana.
Por qué IMPSA confía en cobrar la deuda venezolana: 7 claves
En sus estados financieros al 30 de junio de 2025, IMPSA -controlada desde 2024 por el consorcio norteamericano IAF- mantiene una expectativa positiva respecto al cobro de la deuda que la estatal venezolana Corpoelec mantiene desde hace más de una década.
Más allá de la deuda a cobrar -unos U$S 130 millones-, la eventual reactivación de los trabajos generaría un flujo a futuro que podría terminar de sanear la economía de IMPSA. Al respecto, sólo los contratos de Tocoma y Macagua suman casi U$S 2.000 millones (U$ S 1.390.040.715 más U$S 484.000.000).
"El 92,81% del saldo de créditos por ventas al 30 de junio de 2025 se deriva de sus contratos con CORPOELEC, una empresa operadora estatal encargada de la realización de las actividades de generación, transmisión, distribución y comercialización de potencia y energía eléctrica de propiedad del gobierno de la República Bolivariana de Venezuela", indicó IMPSA en sus estados financieros.
En el mismo documento, IMPSA enumera una serie de razones que fundamental su optimismo para que Corpoelec cancele la deuda que mantiene con la compañía con sede en Mendoza y eventualmente reactive la ejecución de los contratos de la hidroeléctricas.
1- Avance físico significativo. Dos de las diez turbinas de Tocoma ya están montadas y listas para operar. Una tercera cuenta con el rodete tipo Kaplan y sus mecanismos armados, mientras que las restantes tienen un grado de fabricación superior al 70%.
2- Necesidad crítica del cliente. Según IMPSA, Corpoelec ha manifestado su interés en continuar el proyecto por la grave crisis energética que atraviesa Venezuela, subrayando que es indispensable completar la obra para reforzar el sistema eléctrico del país.
3- Inexistencia de antecedentes de cancelación. El Directorio de IMPSA considera que no hay precedentes a nivel mundial de cancelación anticipada de una obra hidroeléctrica de tal envergadura y con este nivel de avance.
4- Firma de la Adenda N° 6. El 25 de febrero de 2022, las partes firmaron una adenda que extendió por 60 meses la vigencia del contrato. Este documento, el primero en más de seis años desde la última adenda, prevé acordar un nuevo programa de ejecución, alcances, montos y cronograma de pagos.
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5- Previsión presupuestaria venezolana. En diciembre de 2024, el gobierno de Venezuela incluyó en su propuesta de presupuesto nacional 2025 una asignación específica para el proyecto Tocoma.
6- Negociaciones y ratificación de política de provisiones. IMPSA afirma que mantiene comunicación permanente con Corpoelec y ratificó su política de provisiones en mayo de 2024, basada en los avances de las conversaciones. Actualmente ha provisionado $ 25.845 millones sobre saldos pendientes de facturar, siguiendo un esquema gradual iniciado en 2022.
7- Extensión contractual y facilidades regulatorias. Corpoelec expresó su voluntad de extender el contrato original del proyecto, y la Secretaría de Industria y Comercio de Argentina otorgó a IMPSA un plazo especial para el uso de mercaderías importadas temporariamente hasta mayo de 2026, alineado con el nuevo cronograma del proyecto.
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