La temporada 2022 está siendo una tortura para Lewis Hamilton. Cada clasificación, cada carrera, los resultados terminan siendo frustrantes para el británico, acostumbrado a estar entre los mejores.
El multicampeón de la Fórmula 1 no puede ocultar su malestar respecto del rendimiento de los Mercedes, que parecen ser los más afectados tras los cambios en la reglamentación.
Y el sprint en Imola no fue la excepción de este comienzo de año para el olvido. Hamilton largó 13º y terminó 14º.
Si bien el W13, sobre todo el de Rusell, tuvo un buen comportamiento durante los entrenamientos libres del sábado, las esperanzas se desvanecieron rápidamente.
De esta manera y a cuatro fechas de iniciado el campeonato, Hamilton parece despedirse anticipadamente de una lucha que nunca lo tuvo como protagonista.