Tras la brutal agresión a un árbitro, paralizaron la Liga de Turquía

El presidente de un club noqueó a un árbitro luego del empate del equipo rival. Por esa agresión, está detenido y los árbitros del país decidieron parar.

Tras la brutal agresión a un árbitro, paralizaron la Liga de Turquía

Editó: Juan Manuel Serra

 La tremenda trompada que le propinó el presidente del club Ankaragücu, al árbitro del encuentro ante el Rizespor, terminó con una huelga del colectivo arbitral de ese país, que paralizó las actividades de la Liga de Turquía hasta el próximo martes.

Este martes, luego del empate agónico de Rizespor (gol del argentino Adolfo Gaich), a través de un penal polémico, cobrado por el árbitro Umut Meler, el presidente de Ankaragücu, Faruk Koca, bajó al campo de juego y golpeó en el rostro al juez del partido, desatando un caos sobre el césped. 

Debido a esto, el agresor fue detenido y el árbitro trasladado a un hospital para evaluar posibles lesiones debido al golpe. 

Luego de viralizada la agresión, el colectivo de árbitros de Turquía, decidió presentar su renuncia masiva a las ligas de ese país, acusando malos tratos permanentes y amenazas, por parte de jugadores, allegados, fanáticos y también de dirigentes. 

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Sin embargo, el presidente de la Federación de Fútbol de Turquía, Mehmet Büyükeksi, confirmó en rueda de prensa, que los torneos se reanudarán el próximo martes 19 de diciembre, luego de mantener una reunión con la cúpula dirigencial del fútbol turco. 

La brutal agresión dio la  vuelta al mundo, e incluso provocó la condena por parte del propio presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, quien visitó al juez en el hospital. 

Además, también se pronunció el presidente de FIFA, Gianni Infantino, quien calificó el hecho como "inaceptable".

El árbitro Meler recibió la visita del presidente Erdogan.

Por su parte, el presidente de Ankaragücu presentó su renuncia a la institución, mientras aguarda tras las rejas el proceso judicial que se está armando en su contra, con lo que se espera que reciba una condena ejemplar. 

Koca le propinó un fuerte puñetazo en la cara, a la altura del ojo izquierdo, que tumbó al suelo a Meler, provocándole una grave hinchazón, por lo que fue hospitalizado para evaluar posibles daños internos. Afortunadamente, el juez fue dado de alta, sin mayores consecuencias de salud.

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