Broggi, el acierto que puso a Gimnasia en la gran final

La apuesta de la dirigencia del Lobo dio resultado. El arribo de Ariel Broggi no solo revitalizó el juego y el ánimo del plantel, sino que transformó una campaña correcta en una temporada que podría quedar en la historia.

Broggi, el acierto que puso a Gimnasia en la gran final

Por: Santiago Montiveros

En el fútbol, las decisiones que se toman a tiempo suelen marcar la diferencia entre una campaña "aceptable" y una campaña que podría quedar en la historia. Esto lo comprendió la dirigencia de Gimnasia y Esgrima de Mendoza, que en un momento bisagra del campeonato se animó a mover el tablero y reemplazó a Ezequiel Medrán por Ariel Broggi. Hoy, no sólo el hecho de disputar la final por el primer ascenso ante Deportivo Madryn respaldan la decisión, sino también los números.

El cambio no fue sencillo, pero tampoco improvisado. Medrán había armado el plantel y conocía el vestuario, pero los resultados, si bien no eran del todo negativos, mostraban un techo y la perspectiva futura era preocupante. Se vislumbraba que, de continuar así, no habría chances reales de ascenso, sobre todo porque el equipo ante partidos clave fallaba.

La derrota ante Temperley en el Legrotaglie, con un hombre más en cancha, terminó de quebrar la paciencia del hincha y del propio club. Fue el punto de inflexión para aplicar un Plan B que ya estaba en carpeta: Ariel Broggi, un técnico joven que, más allá de su breve estadía como DT de Banfield, había dado sus primeros pasos en Brasil y Europa, al lado de Eduardo "Chacho" Coudet.

El impacto fue inmediato. Desde que asumió el nuevo DT, Gimnasia ganó los cinco partidos que jugó en el Legrotaglie, con un solo gol en contra. Cien por ciento de efectividad, contundencia y una identidad que convenció al hincha. En casa, el Lobo se volvió una aplanadora. Ningún rival pudo resistir, ni siquiera aquellos que llegaron a Mendoza a no jugar, como Gimnasia de Jujuy, que se dedicó a hacer tiempo de manera insoportable. Y de visitante, a Broggi le tocaron los rivales más "pesados" de la categoría y algunas de las canchas más complicadas, con un aceptable 40% de efectividad.

  Desde que asumió Broggi al frente de Gimnasia (agosto), el Lobo logró el 64% de los puntos.

Con Broggi al mando, Gimnasia y Esgrima alcanzó una efectividad del 64%, apenas por encima del 60% que promedió la gestión de Medrán. A simple vista, la diferencia puede parecer menor, pero en un torneo tan ajustado como la Primera Nacional, ese escaso margen termina marcando la frontera entre una campaña apenas "aceptable" y la posibilidad concreta del ascenso a Primera División, que se disputará posiblemente el sábado en la cancha de Platense (aún sin confirmación oficial y con algunas dudas por la fecha del encuentro).

Ver más: Video: el gol de Antonini que metió a Gimnasia en la gran final

Con el "diario del viernes", la decisión de llevar a Broggi al banco del Lobo fue oportuna. La dirigencia podría haber optado por una postura conservadora, mantener a Medrán y conformarse con una campaña correcta: entrar al Reducido, pelear lo justo y no mucho más. Nadie habría podido reprocharle demasiado a un club que seguía en la pelea por el ascenso. Sin embargo, eligieron lo contrario. Apostaron fuerte, convencidos de que el Plan B podía transformar una buena campaña en una campaña de ascenso. Y, por ahora, no se equivocaron.

Ver más: Broggi, tras el pase a la gran final: "Todos juntos vamos a ir por el ascenso" 

Esta nota habla de: