Compañero Alfredo

Cornejo logró dividir al peronismo y los intendentes del PJ apoyarán su presupuesto.

Compañero Alfredo

Por:Ricardo Montacuto
Director Periodístico

La está pasando mal el peronismo mendocino. No sólo perdieron la provincia luego de una cantidad tan buena de votos como de errores importantes, sino que reducidos en media docena de territorios, han quedado a merced de la administración de Alfredo Cornejo, y de la lapicera.

La necesidad es tirana con quienes necesitan gobernar.

A poco de andar, y con la simple votación de las leyes económicas de recaudación que tuvieron media sanción ayer en la Cámara de Diputados, el nuevo oficialismo de Cambiemos hizo una demostración de fuerza, logrando sumar los votos de diez diputados peronistas que responden a los intendentes azules Alejandro Bermejo, Jorge Giménez, Roberto Righi, Martín Aveiro, y a Emir y Omar Félix en el sur provincial. El radicalismo no necesitaba de estos votos para la media sanción de Avalúo e Impositiva. Pero sí de por lo menos siete votos justicialistas para obtener el nivel de gasto y endeudamiento previstos en el Presupuesto que se votará esta semana en ambas cámaras. “Ya los tiene…” dijo desilusionado uno de los dirigentes que se resiste a aprobarle el presupuesto a Cornejo. 

Pero el gobernador puede dormir tranquilo. Se aseguró los votos ayer al mediodía en una reunión muy reservada con los seis intendentes del peronismo en la Casa de Gobierno. Tan secreto fue el encuentro, que la prensa oficial no distribuyó información ni las fotos que se obtuvieron. Más tarde, muchos diputados votaron las leyes económicas sin saber de esta reunión. "Ellos pidieron reserva hasta que se vote el presupuesto" dijo una fuente radical. "Decidimos trabajar todos juntos por la provincia, ayudarnos entre municipios y gobierno y salir de esta situación tan difícil sin politiquería ni palos en la rueda. De eso se habló en la reunión. Y sí, es cierto que pedimos no difundirla..." comentó escuetamente uno de los jefes comunales que participó del meeting con Cornejo.

No le sucederá al gobernador lo que sí debió pasar Pérez, en sus dos últimos años de gestión, cuando la oposición tenaz del radicalismo lo dejó sin presupuesto ni toma de deuda por dos años. Deuda que al final terminará pidiendo Cornejo porque la provincia está desfinanciada. 

No hace falta recordar que hace apenas semanas, el Estado tenía problemas para pagar los sueldos.

Buena onda.

La situación del peronismo

El PJ ha quedado claramente dividido entre quienes tienen responsabilidad de gobernar y prefieren acordar con Alfredo Cornejo, y quienes no. Por eso ayer hubo diez diputados peronistas que apoyaron Avalúo e Impositiva, y que muy probablemente el jueves votarán el presupuesto tal como el gobernador lo ha enviado a la Legislatura, con una nueva toma de deuda de unos 5.000 millones de pesos y gastos por 54.000 millones.

El peronismo viene revuelto desde la derrota electoral que significó la pérdida del gobierno y de los principales bastiones del Gran Mendoza. Y la situación se agravó cuando se perdieron las principales provincias y el gobierno nacional a manos de Macri, los radicales y los diversos grupos de Cambiemos. No quedó refugio para nadie. La semana pasada, los legisladores que se habían levantado intempestivamente de la presentación del presupuesto que hacía Martín Kerchner, habían logrado organizar una reunión que debía hacerse ayer a la tarde en el hotel Portal de los Andes. Pero fracasó temprano, cuando empezaron a llover los mensajes anunciando que no se hacía, porque ya había un acuerdo para votar las leyes económicas de Cornejo.

Jorge Tanús.

Hubo diputados que hirvieron de furia con sus propios intendentes. En un momento, Jorge Tanús –azul, del Este, opera con Jorge Omar Giménez- se inflamó de la parte inferior de sus atributos y amenazó ir por todo. “¡Votemos ya el presupuesto y terminemos con esto… saquémonos de encima el problema!” les habría dicho al resto de los legisladores. Pero los intendentes los frenaron, porque no habían arreglado nada en materia de obras con el gobierno. Las charlas anoche entre los peronistas “dialoguistas” y los referentes de Cambiemos iban y venían, mientras Cornejo monitoreaba todo, para asegurarse los resultados de la reunión del mediodía.

Los motivos para estar de uno u otro lado sobraban. “Esto fue un descuerdo muy malo, porque en principio se iba a votar todo en contra y los intendentes apretaron” se sinceró un senador que deberá poner las barbas en remojo cuando el presupuesto pase por la Cámara Alta, donde los números resultan igual de sencillos para Cornejo. Sólo necesita 5 de los 15 senadores del PJ para reunir la mayoría especial que le requiere el endeudamiento. Y entre Bermejo y Félix juntan una media docena, o tal vez siete.

“Los compañeros que votaron a favor de Avalúo e Impositiva cometieron un error. Se entregaron gratis, dando una señal de debilidad. ¿Qué le van a ir a pedir a Cornejo ahora, si ya tiene los votos? Los intendentes les hacen sentir a los diputados que su voto no tiene importancia” se quejó uno de los ocho legisladores que votó en contra de las leyes de recaudación.

La sesión de ayer de los diputados.

También hay que oír la otra campana. “La situación financiera es culpa del peronismo. Hemos entregado la provincia muy mal, hemos perdido departamentos importantes donde dejamos líos muy grandes… hay que votar el presupuesto, ayudar a gobernar, salir de esto, y en noventa días a Cornejo se le acaba el discurso de echarnos la culpa de todo” se sinceró un legislador azul.

Las cuentas apretadas dicen que los azules y los del sur están de un lado, y que los de la Corriente, sectores del kirchnerismo y La Cámpora, en contra.

“Igual, hay que estar atentos porque los legisladores están muy enojados con los intendentes, que lo que buscan es cobrarse rápido la guita de coparticipación que les quedó debiendo Paco” explicó un diputado peronista. Puede que tenga razón, pero si algo distingue al peronismo azul es que son orgánicos. Van a votar lo que sus jefes políticos ordenen.

La Cámara de Diputados mostró ayer un panorama raro. En contra de la ley votaron Omar Parisi, Gustavo Majstruk, Sonia Carmona, Lucas Ilardo, Daniel Rueda, Norberto González, Mario Díaz y Patricia Galván y los 4 legisladores del FIT, Héctor Fresina, Martín Dalmau, Cecilia Soria y Macarena Escudero. A favor lo hicieron Silvia Ramos, Cristina Pérez, Lidia Ruiz, José Muñoz, Alejandro Viadana, Claudia Segovia, Francisco Cofano, Jorge Tanús, Ernesto Molina y Leandro Giacomelli. Bianchinelli no votó, pero adscribe a este grupo.

Para el Senado, los votos más duros y en contra se ven venir de Eduardo Bauzá (Corriente, ciurquismo), Luis “Gringo” Böhm (kirchnerismo) y Gustavo Arenas (Corriente).

“La próxima interna del peronismo no será territorial, sino ideológica. Habrá un peronismo ‘peroganso’ que acodará con Cornejo y Macri, y nosotros, que vamos a ser el kirchnerismo-peronismo que va a resistir y ser la oposición” dijo un dirigente al que aún le quedan algunas balas.

Lo que sea. Pero todo esto, a Cornejo le salió casi gratis. Y podrá enfrentar el año sabiendo que tiene el presupuesto y el nivel de deuda que quiso.

Hizo lo que mejor le sale. Ejercer el poder lejos de los micrófonos.