Ratifican las sanciones para más de 100 estudiantes en el colegio Santa María

Este jueves, Juan Andrés Torrecillas, apoderado legal del Colegio Santa María, ratificó a Radio Post (92.1 en el Gran Mendoza y San Martín, 96.9 en Luján de Cuyo y 96.7 en La Paz) que las sanciones aplicadas a más de 100 estudiantes "se mantienen vigentes y operativas en todos sus términos". 

En esta dirección, sostuvo que la "resolución 65" del Rectorado fue comunicada a las familias e incluye anexos con el detalle del proceso disciplinario. La medida establecería 20 amonestaciones para cada uno de los 140 alumnos involucrados, aunque se ofrecería un plan de reparación y una instancia formativa que permitiría reducir la sanción a 14 amonestaciones.

El conflicto comenzó el jueves pasado, cuando el colegio informó que no se permitiría celebrar el "último último día", una tradición que acompaña al conocido "último primer día". Esa decisión derivó en una reacción descontrolada, con desmanes dentro del predio y daños materiales. 

 Entre los episodios registrados hubo insultos a autoridades, roturas de mobiliario y destrucción de trabajos académicos de estudiantes de la carrera de diseño de la Universidad Champagnat. "Los hechos lamentables... y por sobre todo una reparación integral hacia los alumnos de la carrera de diseño... que vieron rotos sus diseños académicos aun sin evaluar", señaló Torrecillas.  

El representante legal defendió la proporcionalidad de las sanciones y negó que existan alumnos "privilegiados" o excluidos sin razón. Explicó que desde el 27 de noviembre el Consejo Escolar realizó "un relevamiento pormenorizado" cuyos resultados están individualizados en el anexo 1 de la resolución. "La medida ya ha ponderado la participación de cada uno de ellos. Si alguien tiene un elemento complementario... será bienvenido para ampliar el universo de alumnos alcanzados", afirmó. 

Consultado sobre si los 140 sancionados participaron de igual manera en los desmanes, respondió: "Sí, exacto... todos tuvieron participación en cada uno de los momentos donde se observaron conductas no compatibles con el reglamento".

Torrecillas también detalló que el plan dispuesto por la escuela combina un enfoque pedagógico, disciplinario y económico, un "bloque indivisible" que exige reparación, capacitación y aporte para cubrir daños materiales. "Muchos padres no habían comprendido la extensión del plan de trabajo y, una vez explicado, manifestaron estar de acuerdo en que los chicos recapaciten", expresó. La resolución incluye un cronograma del 12 al 18 de diciembre con actividades, objetivos y materiales obligatorios, y exige asistencia bajo control institucional.

 El apoderado legal remarcó que el episodio obliga a reforzar el trabajo formativo dentro de la escuela. "Debemos concientizar en principios éticos, morales y jurídicos... la medida tiene que ser ejemplificadora", afirmó. También destacó la corresponsabilidad de las familias para evitar situaciones de riesgo vinculadas a actividades como UPD o UUD, y sostuvo que es clave prevenir que los alumnos lleguen al colegio alcoholizados o en condiciones inadecuadas. 

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