Desde ISCAMEN realizaron una serie de nuevas pruebas para futuras liberaciones. En los ensayos de campo, la efectividad alcanzó el 90%.
Realizan nuevas pruebas de mosquitos estériles para el verano
La Bioplanta del Iscamen y la Agencia Internacional de Energía Atómica avanzan en estudios para mejorar la calidad de los mosquitos machos estériles utilizados en los ensayos de control del Aedes aegypti.
Según detallaron desde el Iscamen, en los barrios intervenidos se logró una reducción inédita de la población silvestre, lo que consolida a la técnica del insecto estéril como una herramienta ecológica para enfrentar al dengue.
Se trata de un trabajo que lleva más de cinco años de investigación, en el que Mendoza dio un nuevo paso en la aplicación de la técnica del insecto estéril (TIE) para el control del Aedes aegypti, mosquito transmisor del dengue, zika y chikunguña. Los estudios más recientes, realizados entre marzo y junio en dos barrios de Guaymallén, mostraron una disminución del 90% de la población silvestre en las áreas intervenidas.
Los resultados, difundidos por la Bioplanta del Iscamen, forman parte de los ensayos de competencia y compatibilidad desarrollados junto a la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA) para mejorar la línea de cría de mosquitos machos estériles. Esta cooperación apunta a optimizar la calidad del material producido y planificar futuras liberaciones en territorio.
Los primeros ensayos de liberación comenzaron en 2024, con la participación del Ministerio de Salud y los municipios de Guaymallén, Godoy Cruz y San Martín. El objetivo inicial fue evaluar la efectividad de la TIE, un método ambientalmente seguro que se integra a las estrategias de manejo de plagas junto a medidas como la eliminación de criaderos, el monitoreo y acciones químicas focalizadas.
Para medir el desempeño de los machos esterilizados, se trabajó en dos áreas diferenciadas: una con monitoreo y liberación de insectos de la Bioplanta, y otra con monitoreo únicamente, utilizada como zona testigo. En la primera se verificó una reducción de 10 a 1 en la población silvestre, lo que representa una baja del 90%.
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La TIE consiste en criar y esterilizar machos de Aedes aegypti, que al ser liberados compiten con los machos silvestres por el apareamiento con las hembras. En esta especie, solo la hembra pica para obtener proteínas que le permiten producir huevos, mientras que los machos se alimentan de néctar. Garantizar que en las liberaciones no haya hembras es esencial, por lo que la separación de pupas por sexo es un paso crítico en el proceso.
Esta técnica ya se usa con éxito para el control de distintas plagas de importancia sanitaria y productiva, como la mosca de la fruta, la mosca tsetsé o el gusano barrenador del ganado.
Antes de cada ensayo en Mendoza, equipos del Iscamen y los municipios realizan un trabajo de comunicación casa por casa para explicar el procedimiento y reforzar recomendaciones clave, como el descacharrado y la eliminación de potenciales criaderos. La participación vecinal sigue siendo un componente indispensable para sostener los resultados obtenidos.
Con los avances logrados, Mendoza se posiciona entre las jurisdicciones que apuestan a métodos innovadores, sostenibles y avalados internacionalmente para reducir el riesgo sanitario que representa el Aedes aegypti.
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