La ahora exmagistrada que quiso filmar un documental sobre el juicio por la muerte de Diego Maradona, no podrá ejercer más y tampoco se podrá jubilar como jueza.
Destituyeron a Makintach, la controversial jueza del caso Maradona
El Jurado de Enjuiciamiento de la provincia de Buenos Aires resolvió por unanimidad (11 votos) destituir a Julieta Makintach de su cargo de jueza, marcando el fin de su carrera en la magistratura y prohibiéndole ocupar cualquier otra función judicial en el futuro. La decisión, que se conoció este martes a las 10:40 en el Anexo de la Cámara de Senadores, fue el resultado final del proceso desencadenado por las graves irregularidades cometidas durante el juicio por la muerte de Diego Maradona.
La exmagistrada, cuyo caso tomó notoriedad pública a raíz de su rol protagónico en el documental "Justicia Divina" mientras se desarrollaba el debate oral, no estuvo presente en la audiencia para escuchar la lectura del fallo.
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El Documental como Prueba de Desvío
El jurado de 11 integrantes, presidido por Hilda Hogan, presidenta de la Suprema Corte Bonaerense, cerró el debate el pasado jueves con los alegatos finales y definió el veredicto por mayoría durante el fin de semana, plasmándolo en una sentencia de 115 páginas.
La fiscal Analía Duarte, a cargo de la acusación, fue contundente en su alegato al afirmar que Makintach "ha perdido las condiciones que exige la Constitución para el ejercicio de la magistratura". Duarte sostuvo que la jueza conoció y aceptó la propuesta del documental que incluía títulos de capítulos como "la Justicia y la sentencia", lo que evidenció un conflicto de intereses y una pérdida de imparcialidad.
El senador Sergio Vargas, quien participó como conjuez, resumió la gravedad de la conducta en la lectura del veredicto: "Cuando se encienden las cámaras, corre peligro que el ego de un juez apague la justicia," advirtiendo que la búsqueda de atención mediática por parte de un juez genera la sospecha de que sus decisiones están motivadas por la "fama o notoriedad" y no solo por la ley.
La destitución implica para Makintach no solo la pérdida inmediata de su cargo, sino también la anulación de la posibilidad de percibir la jubilación como magistrada.
"Yo después de lo que viví como imputada no quiero pertenecer al poder judicial... me quiero ir en paz," había manifestado.
Entre el público que presenció la resolución final se encontraban Verónica Ojeda, su hijo Dieguito Fernando y el abogado Mario Baudry, quienes por primera vez asistieron al proceso y escucharon el fallo en primera fila. La resolución será remitida a la Suprema Corte en los próximos días.
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