El gobierno de la provincia de Buenos Aires autorizó la distribución de libros con motivo de educación sexual en bibliotecas de escuelas secundarias y desató la indignación de padres. Eduardo Feinmann criticó al ministro de Educación de la provincia.
Libros de sexo: fuerte cruce entre periodista y un funcionario de Educación
El gobierno de la provincia de Buenos Aires autorizó la distribución de libros con motivo de educación sexual en bibliotecas de escuelas secundarias y desató la indignación de padres. Eduardo Feinmann criticó al ministro de Educación de la provincia.
En las últimas semanas se viralizó la protesta de padres de distintos colegios secundarios de la Provincia de Buenos Aires, quienes reclamaban por la presencia en la currícula de un programa de literatura que incluye libros con contenido sexual explícito, que generó preocupación e indignación.
En este marco, el director general de Cultura y Educación de la provincia de Buenos Aires, Alberto Sileoni, habló públicamente en el programa radial de Eduardo Feinmann, en Radio Mitre de Buenos Aires, quien señaló que "Hay fragmentos realmente aberrantes que los degenerados de la provincia de Buenos Aires están obligando a leer a los alumnos".
%uD83D%uDCDACRUCE POR LIBROS ESCOLARES Alberto Sileoni defendió el programa "Identidades bonaerenses", que incluye libros con escenas sexuales explícitas, mientras que Feinmann cuestionó el contenido. Sileoni explicó que los libros no son obligatorios, pero Feinmann destacó la indignación pic.twitter.com/F4Y115iUrj
El funcionario del gobierno de Buenos Aires enfrentó al periodista diciendo que "cuando usted arranca diciendo eh, estupor y materiales aberrantes para niños e inevitablemente los oyentes tienen que indignarse. Entonces, esos no son libros de educación sexual. Esta es una colección de literatura. No son libros para los estudiantes. Son libros para las bibliotecas. Consideramos que son herramientas para los docentes y los bibliotecarios. No se obliga a los estudiantes a leerlos. No son para niños. Por tanto, me parece que ya, eh, podemos arrancar desde otra, desde otro lugar".
"Si hay libros que tienen una temática política o relaciones problemáticas o escenas de sexo o lenguaje, vocabulario soez, esos libros no van para la secundaria básica, son libros que van para la secundaria orientada 16-19, 16-19. Y tampoco va para el alumno que tiene 16 o 19. Es un libro que va con una inscripción que dice requiere acompañamiento docente. Está bien, entonces es distinto a los 16-19 y aún antes, Feinmann, los chicos están inmersos en el desarrollo de la sexualidad y todos sabemos, todos sabemos, usted lo sabe y todos sabemos que mucho antes de los 16 a un click de teléfono de computadora acceden a la más brutal pornografía en la soledad de sus habitaciones. Esto no es pornografía, esto es literatura", argumentó Sileoni.
El funcionario continuó argumentando que algunas de las escenas que aparecen en los libros, como en Cometierra, "pueden convertirse en una escena pedagógica", manifestó Sileoni, a lo que Feinmann leyó un fragmento de ese libro, con claro contenido sexual y le replicó: "¿Esto es literatura para usted? ¿En serio?", a lo que Sileoni respondió, "Sí, esto es literatura".
Silioni lo dejó mudo a Feinmann. Cosas que te pasan cuando querés armar escándalos de forma barata. pic.twitter.com/8grRRnsOIp
Para Sileoni, este tipo de literatura le permite a los chicos poder hablar de estas cosas de otra manera: "Permite hablar en la escuela de escenas eh, ¿difíciles? No discutimos con las familias, convergemos con las familias. Aún hoy los chicos nos dicen "estas cosas no las puedo hablar en casa", aún con familias presentes. Entonces nosotros creemos que la escuela es un buen lugar para escuchar a los jóvenes que a veces los escuchan pocos".
Luego, Sileoni acusó al periodista de atacar políticamente al gobernador de Buenos Aires, Axel Kiciloff, a lo que Feinmann actotó "al gobierno de la provincia de Buenos Aires", no al gobernador únicamente.
Por último, Sileoni explicó que "La escuela no niega la diferencia entre el hombre y la mujer. La escuela no enseña prácticas sexuales. La escuela no alienta la homosexualidad o la transexualidad. La escuela no enseña a abortar. ¿Sabe lo que hace la escuela? Te acepta como sos. En eso la escuela es mejor que la sociedad. No los discrimina, no los persigue, no los mete en cana. Bueno, hay una diferencia sustantiva. Feinmann yo lamento que no se vea. Le doy el derecho a que no lo vea. No le acepto la palabra degenerado. No le acepto la palabra aberrantes, porque son materiales muy probados. Una gran cantidad de estas escritoras son multipremiadas. Alguna de ellas acaba de de recibir el Premio Konex. No se revolean los libros en las escuelas, se los acompaña, se lo explica. Es para los docentes, es para los bibliotecarios", concluyó.
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