"Ahí no podía vivir un ser humano", aseguraron quienes crearon una maqueta para echar luz sobre cómo fue la muerte del 10.
Así es la impactante reconstrucción del lugar donde murió Maradona
La reconstrucción del lugar donde Diego Armando Maradona pasó sus últimos días ha generado conmoción y reavivado el debate sobre las condiciones en las que se encontraba el astro del fútbol en sus últimos momentos.
A través de un trabajo minucioso, dos estudiantes de arquitectura lograron plasmar en una maqueta a escala la crudeza de la vivienda en la que el Diez fue alojado antes de su fallecimiento.
"Una pocilga", así definió Eugenio Artus el estado del inmueble ubicado en el barrio privado de Tigre donde Maradona pasó sus últimos catorce días de vida. Junto a Nicolás Hilbert, su compañero en el último año de la carrera de Arquitectura de la Universidad de Belgrano, recibieron el encargo de recrear a escala el lugar con un nivel de detalle sorprendente.
La maqueta, basada en más de 250 fotografías de la policía científica y planos forenses, fue presentada en el juicio que busca determinar las responsabilidades en la muerte del exfutbolista.
Según relataron al medio Diario.AR, ambos estudiantes quedaron impactados por el deterioro y la precariedad de la vivienda. "Ahí no podía vivir un ser humano", sentenció Artus, quien confeccionó los planos, mientras que Hilbert llevó la estructura a un software de diseño 3D para luego imprimirla en impresoras 3D. El proceso de armado llevó seis días de trabajo continuo.
La casa, lejos de ser una residencia cómoda para una persona con movilidad reducida, presentaba graves deficiencias. Entre los elementos modelados en la maqueta se destacan una silla higiénica en una esquina del dormitorio, un playroom con ventanas tapadas con durlock, una cocina conectada a un lavadero y un baño de recepción de dimensiones mínimas.
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"Había muebles colocados en lugares que no correspondían", señaló Artus. También llamaron la atención las tres heladeras tipo cava ubicadas en distintos puntos de la vivienda, una de ellas en la habitación del exfutbolista. Durante el juicio se intentará esclarecer si contenían alcohol.
El abogado Fernando Burlando, quien representa a Dalma y Gianinna Maradona, solicitó la confección de la maqueta con el objetivo de evidenciar que el entorno en el que se encontraba Maradona no era adecuado para su recuperación. "Es muy ilustrativa, sobre todo para mostrarle al Tribunal qué es lo que pasaba en esa casa. La maqueta es hermosa, pero la casa no era así, era una tapera. Era una mugre, una mugre", expresó Burlando.
El juicio, que se reanudará este martes, contará con la declaración de los primeros testigos, entre ellos tres efectivos policiales que fueron los primeros en ingresar a la vivienda tras la muerte de Maradona el 25 de noviembre de 2020. La estrategia de la fiscalía apunta a reconstruir los últimos días del exjugador, contrastando las pruebas médicas con el estado de la vivienda y las decisiones tomadas por el equipo de salud encargado de su cuidado.
En la causa están imputados el neurocirujano Leopoldo Luque, la psiquiatra Agustina Cosachov, el psicólogo Carlos Díaz, la médica Nancy Forlini, el coordinador de enfermeros Mariano Perroni y los enfermeros Ricardo Almirón y Dahiana Madrid. A todos se les acusa de homicidio simple con dolo eventual, delito que conlleva penas de entre ocho y 25 años de prisión.
La maqueta, que permanecerá en el Juzgado de San Isidro, se ha convertido en una pieza clave en la reconstrucción de los hechos. Más allá de su valor técnico, la obra de los jóvenes arquitectos visibiliza con crudeza la negligencia en el trato a uno de los ídolos más grandes de la historia del fútbol.
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