La vicepresidenta firmó un decreto que les permite a los senadores decidir si aceptan o no los incrementos automáticos en sus dietas tras las negociaciones salariales del personal legislativo.
Villarruel habilitó a senadores a rechazar sus aumentos salariales
La vicepresidenta Victoria Villarruel firmó un decreto que permite a los senadores manifestar por escrito si desean rechazar los aumentos en sus dietas, los cuales se ajustan automáticamente cada vez que los empleados legislativos cierran una paritaria y obtienen mejoras salariales.
Esta medida está contenida en el decreto presidencial 344/25, que otorga un aumento del 1,3% en los salarios de abril y un bono de 100.000 pesos para los trabajadores de la Cámara Alta. Además, en su tercer artículo, el decreto invita a los senadores "a ejercer la opción de adecuar o no, total o parcialmente, sus respectivas dietas, informándolo por nota a Presidencia".
La iniciativa busca resolver el conflicto que se genera cada vez que los empleados del Congreso logran un aumento salarial y los senadores se dividen entre quienes aceptan el incremento y quienes, por temor a críticas sociales o mediáticas, manifiestan públicamente su rechazo o amenazan con no percibir la suba, algo que hasta ahora no podían formalizar.
El problema se remonta a abril del año pasado, cuando los senadores aprobaron una reforma que vinculó sus ingresos a los sueldos de los empleados legislativos mediante un sistema de módulos en lugar de un monto fijo en pesos. Con la última paritaria, el valor de esos módulos subió, y elevaron las dietas brutas a 9,5 millones de pesos, unos 300.000 pesos más que el mes anterior.
Si bien Villarruel no puede suspender los aumentos, ya que la reforma fue votada por los propios senadores, ahora les da la facultad de decidir si aceptan o no los incrementos que surjan de futuros acuerdos paritarios con los gremios del Congreso.
Hasta el momento, al menos tres senadores -Luis Juez (Pro-Córdoba), Carlos Arce y Sonia Rojas Decut (Frente Renovador de la Concordia)- habrían optado por rechazar el aumento.
El tema generó polémica el año pasado, cuando el presidente Javier Milei criticó duramente a los legisladores por subir sus ingresos en medio de un ajuste fiscal, acusándolos de pertenecer a "la casta". Tras ese episodio, los senadores votaron congelar sus dietas hasta diciembre, medida que luego fue prorrogada por Villarruel hasta marzo de este año.
Con el vencimiento del congelamiento en marzo y tras el rechazo de una propuesta para mantenerlo, las dietas subieron nuevamente, alcanzando los 9 millones de pesos. Después de una nueva paritaria, que otorgó un aumento acumulado del 3,9% para marzo, abril y mayo, las dietas volvieron a subir a 9,5 millones de pesos brutos.
Ver: Expectativas por el fallo de la Corte sobre Vialidad: el peronismo se reagrupa



