La oposición impulsó una sesión especial para aprobar cinco iniciativas que el Gobierno rechaza y amenaza con vetar. Este jueves los senadores convirtieron en ley la suba en las jubilaciones, la vuelta de la moratoria y la emergencia en discapacidad, pero la sesión sigue.
El Senado debate los proyectos consensuados por los 24 gobernadores
Este jueves desde las 14, el Senado de la Nación vive una jornada clave. Con el impulso de bloques opositores -entre kirchneristas y sectores dialoguistas-, la Cámara Alta debate una serie de proyectos que generan fuerte tensión con el oficialismo. Tres de esas iniciativas ya venían con media sanción de Diputados: el aumento a las jubilaciones, la reactivación de la moratoria previsional y la declaración de la emergencia en discapacidad.
Ante la perspectiva de una tarde negativa para el Gobierno, los senadores de La Libertad Avanza se retiraron del recinto. Minutos después, a las 17, el cuerpo aprobó un aumento del 7,2% para jubilados y pensionados, algo que el Ejecutivo rechazaba por considerarlo "inviable fiscalmente" y preveía vetar. La norma salió con 52 votos a favor y 4 abstenciones, e incluye un incremento del bono de $70 mil a $110 mil.
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Otro de los puntos más sensibles que salió en contra de las intenciones del Gobierno es el regreso de la moratoria previsional. Con 39 votos afirmativos, 14 negativos y 1 abstención, el proyecto de prórroga fue aprobado. De acuerdo con la Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC), unas 220 mil personas podrán acceder a la jubilación.
También a la tarde fue aprobada la Ley de Emergencia en Discapacidad. La propuesta contempla la regularización de pagos atrasados, la actualización de aranceles para prestadores, una reforma en el sistema de pensiones no contributivas, el fortalecimiento de la Agencia Nacional de Discapacidad y el cumplimiento del cupo laboral. Desde el oficialismo consideran que se trata de una norma "regresiva y asistencialista". El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, había anticipado que el Gobierno vetará la ley.
Por otra parte, los gobernadores también buscan avanzar con dos iniciativas directamente ligadas a la situación fiscal de las provincias. Una de ellas propone cambios en el reparto de los Aportes del Tesoro Nacional (ATN) y la otra impulsa la coparticipación de los fideicomisos financiados con el impuesto a los combustibles. Ambos proyectos apuntan a mejorar el flujo de fondos que la Nación transfiere a los distritos, en un contexto donde las transferencias automáticas y no automáticas siguen por debajo de los niveles de 2023, pese a la recuperación parcial durante este año.
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