Quincho: picardías, papelones y el acuerdo que cocina la UCR

Este sería el primer encuentro presencial de los amigos después de las elecciones, pero a esa altura el Omar y Ludovico, el radical y el libertario del grupete, ya se habían encargado de hacer los deberes y vía WhatsApp gastar al Dani, el peronista que confiaba en, al menos, una "derrota digna"; recién el sábado al mediodía se habló de otra cosa en el grupo cuando el Ruso, el economista, tiró un "¿Francesco esta noche?", y le siguieron tres pulgares para arriba.

El encuentro fue puntual, como si todos hubiesen estado esperando ese rato de catarsis más que la comida. Francesco estaba lleno, excepto por la mesa junto a la estufa apagada que los mozos ya sabían que tenía dueños. Apenas se sentaron, Ludovico levantó la copa con una media sonrisa y lanzó el primer dardo de la noche: "Brindo por los que creyeron en la derrota digna". El Dani ni lo miró: antes de chocar las copas, probó el Pinot Noir de Rutini y respiró hondo.

Ahí nomás intervino el Omar, pero sin que quede claro si era para poner paños fríos o conspirar con su socio libertario con una sutil chicana. "Basta, hermano, no se puede hablar de política todo el tiempo. Comamos primero", largó y atacó el antipasto. Pero el Ruso, con ese tono de economista que no sabe callarse, se metió enseguida: "No es política, es matemática. Les dieron una paliza en todos lados". El Dani lo miró con resignación, apoyó los codos en la mesa y sin decir una palabra, con un lenguaje gestual inconfundible, pidió clemencia.

El silencio se estiró unos segundos, hasta que el Dani cambió su postura, como quien se rinde pero no tanto: "Igual les digo algo... no hay derrota digna, pero tampoco victoria eterna. Miren que a los suyos les ha durado poco la luna de miel".

Ahí el Ruso se metió de nuevo, pero ya con tono más distendido. "El problema no es quién gana o pierde, sino quién entiende el quilombo que viene. Las cuentas todavía no cierran y como dijimos el otro día, si no hay una tregua con los gobernadores para que salgan las reformas que hacen falta, la economía no va para ningún lado".

(...)

Picardías entre los ganadores, tuits borrados y un papelón

La primera copa de vino había logrado lo que parecía imposible: que el Dani se relajara y el Ruso dejara de dar cátedra. Entonces, los amigos se pusieron a hablar de algunas perlitas que había dejado el domingo electoral, incluso entre los que ganaron por paliza.

-El mismo domingo a la noche en el búnker del Sheraton se notó la incomodidad. Como cuando caen los parientes insoportables el 24 a la noche después del brindis: les tenés que ofrecer algo, escucharlos con cara de buenos amigos y celebrarles los chistes -arrancó el Dani, más relajado-.

-¡Tres hinchadas había! -contó el Omar-. La de Cornejo, la de Petri y hasta la de Correa Llano. Y también le podrías sumar las de los intendentes. 

-Pero lo mejor fue el show de Petri -se metió Ludovico-. Cuando los suyos empezaron con el "¡Luisito Petri gobernador!", el tipo sonreía de oreja a oreja, pero les hacía seña y les pedía que se callaran... igualito a Massa cuando asumió en Economía y le cantaban "somos el Frente Renovador".

-Sí. Me contaron que el que arrancó con el cantito, el más petrista de Mendoza, fue el hijo del doctor Pujol, que era libertario blue y ahora es parte de "Las Fuerzas del Cielo". Otro "púrpura" mendocino -siguió el Omar-. Igual lo mejor vino después. Petri, muy canchero, diciendo que "esto fue un triunfo de Milei" -continuó el Omar-.

-Pará -lo interrumpió Ludovico-. El primo del Luis, el Gustavo Cairo, que es diputado de La Libertad Avanza, salió a tuitear que no sólo era un triunfo de Milei, sino que había sido un acierto la candidatura de Petri y puso que habían sacado 55.000 votos más que la lista provincial.

-A ver.

-A ver nada, porque duró menos que una historia de Instagram. Me contaron que le llamó un amigo radical con algo de poder y el mensaje desapareció.

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-Jajaja. Eso es quejarse de llenos, muchachos -largó el Dani-. Yo valoro lo del peronismo que se la bancó y dio la cara. No fue una mala elección: sacamos 25% en Mendoza, 10 puntos más que en 2023. En el sur podemos decir que pasamos los 30 puntos y en Maipú y el este, lo que es el Segundo Distrito, metimos 2 senadores. No fue una mala elección; el tema es que a los otros les fue muy bien.

El Ruso, siempre atento a las redes, largó el teléfono y se metió en la charla:

-Che, lo de Vadillo fue "cine", pero del malo. Salir a decir que la gente es estúpida porque no lo votó a él... ¿Habrá sido el fin de su corta carrera política?

-Liquidó su carrera como Gabbo.

-¿Qué?

-El personaje de Los Simpson al que se le acabó su carrera artística después de decir que los niños de Springfield eran unos tarados. 

-Jajajajaja. ¡Un Gabbo mendocino!

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La última elección del año: el acuerdo que cocina la UCR

De repente, en la mesa se desplegó un risotto de hongos y trufa, una bondiola braseada al Malbec, ñoquis de pera con crema de espinaca y el clásico Assaggio Francesco.

-Igual no cantemos victoria todavía, muchachos -metió el Omar, mientras pinchaba un ñoqui-. A este bendito año todavía le queda una elección, ¡una que ya está haciendo ruido!

-¿Otra elección? ¿Cuál?

-Las elecciones partidarias de la UCR, en diciembre. Y como el cierre de listas es el 14 de noviembre, están todos a full. Algunos buscando la unidad, otros que siempre quieren romper, y los que reaparecen para ver qué les toca.

-Qué "divertido" va a estar el fin de año -chicaneó el Dani-.

-Pará. Y una cosa más. La gran pregunta de estas internas que atraviesa a todo el radicalismo a esta hora: ¿qué se hace con los de Petri? ¿Los dejan entrar o los mandan a reclamar lugares a La Libertad Avanza?

-¡Cierto! ¿Y qué se dice?

-Y... Petri ya se afilió a La Libertad Avanza, pero los suyos todavía tienen el carnet radical en el bolsillo. Algunos dicen que deberían ser parte, otros que se vayan con los libertarios.

-¿Pero los que cortan el bacalao en la UCR qué opinan?

-Quieren a los petristas adentro de la UCR. Es más: me contaron que ya hubo un acuerdo entre el presidente del partido, el Peti Lombardi, y la vice, que es ni más ni menos que la Griselda Petri. Pero igualmente, en las bases hay "correligionarios" que no quieren saber nada.

-¿Va a seguir el Peti Lombardi como presidente?

-Casi seguro que sí.

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-A lo mejor las gigantografías de Costarelli eran para esta campaña, la de la interna partidaria, y termine siendo presidente de la UCR.

-Jajaja. No, no, ponele todas las fichas a la continuidad del "Peti".

-Che, hablando de radicales, me contaron una perlita que pasó en Guaymallén -largó el Dani, metiéndose en "rodeo ajeno"-.

-¿Qué pasó?

-El otro día, el Concejo Deliberante de Guaymallén entregó premios a abanderados y escoltas en un acto que se hizo en Murialdo, entre otras cosas bicicletas. Y parece ser que la presidenta del Concejo, Verónica Cancela, quería la gran foto del evento subida a una bici, pero al final  no salió.

-¿Se quejó Calvente y no la publicaron?

-No, se pegó terrible palo andando en la bici, así que el video y la foto tuvieron la misma suerte que el tuit de Cairo: desaparecieron.

-Jajaja. Pobre. Cosas que pasan. 

(...)

Cuánto queda de los "Fondos de Portezuelo" y la próxima gran obra que anunciarán

A mitad de la cena, el Ruso pidió un refuerzo: un Dominio Gran Malbec de Rutini. Y largó una pregunta concreta sobre la mesa.

-¿Alguien sabe cuánto queda de la "guita de Portezuelo" o, como le dicen ahora, los 1.000 y pico de millones de dólares del resarcimiento por la promoción industrial?

-Poco -arrancó el Omar-. Más o menos, ya se usó el 80% de esos fondos: poco más de 800 millones de dólares. Pero no es que se haya gastado esa guita: son los fondos que ya fueron asignados a obras, de las cuales sólo algunas ya están en ejecución. O sea, el 80% de los 1.000 palos tiene destino. Y pronto ese 80% va a ser casi 90%, porque se viene otro anuncio que seguramente hará Cornejo cuando vuelva a Mendoza.

-¿Qué obra?

-La Ruta 40, el Acceso Sur. Si te fijás, es la única de las "obras nacionales" que asumió Mendoza que todavía no se anunció. Ya lo hicieron con la 143 y con la 7. Se va a construir la demorada tercera vía en el Acceso Sur entre Paso y Azcuénaga, el ingreso a Luján.

-Hablando de Luján, me contaron que había calentura de algunos intendentes radicales por el puente de la ruta 15 sobre el río Mendoza que la Provincia va a hacer con la guita de Portezuelo. Dicen que no sirve para nada, que es una obra política para quedar bien con el intendente o con algún "correligionario" lujanino -tiró el Dani-.

-Sí, tal cual. Es verdad lo de la calentura o "celos", pero en el Gobierno afirman que el estudio técnico dice que ese puente puede cambiar todo, sobre todo porque ahorra tiempo al transporte público, mucho tiempo.

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Ludovico se acomodó en la silla, con esa media sonrisa que anunciaba veneno.

-Bueno, igual podrían construirlo en Capital al puente ese, así el Yayo, al menos, tiene algo que mostrar del fondo de resarcimiento. Total, de los 18 departamentos, Capital es el único que no vio una obra de esos mil y pico de millones. Ni un cordón.

(...)

"Cómo anda doctora" y otras perlitas de la reunión de Milei con los gobernadores

Con una grapa como "bajativo", los amigos fueron cerrando la juntada, con el Ruso tomando la posta.

-Che, ¿vieron la reunión de Milei con los gobernadores?

-Sí, parecía el video ese del sketch de Key & Peele, ¿lo vieron? Ese donde un presidente saluda a todos con un apretón distinto, cada vez más exagerado. Lo mismo Milei: abrazo a unos, apretón de manos a otros. El reencuentro con Jorge Macri fue "cine".

-Jajajaja. De una. Y a la Hebe le tiró un "cómo anda doctora". Atípico que un presidente tenga presente a una vicegobernadora.

-Acordate que hasta Cornejo ha comentado que Casado chateaba siempre con Milei.

-¿Por qué Casado? ¿Y Cornejo por dónde andaba? -tiró el Dani-.

-Se fue martes a Burdeos a las Grandes Capitales del Vino y a una expo petrolera en Abu Dhabi. Por eso te decía que a la vuelta seguramente anunciará lo del Acceso Sur.

-Che, ¿y qué sabemos de la reunión del Peluca con los gobernadores? -se metió el Ruso-.

-Fue palo y a la bolsa. Ni una galletita les dieron: llegaron, escucharon al presidente y algunos más, y se fueron. Sólo agua.

-¿Algunos más? ¿Qué otros hablaron en la reunión?

-Ahí tenés un dato. Además de Milei, del gobierno nacional sólo hablaron los Caputo.  Toto Caputo, lógicamente, dio detalles del plan de reformas; y Santiago Caputo intervino, más político, para bancar al presidente. "Saltó" cuando un gobernador se quejó por la presunta falta de federalismo: le dijo que si hay algo que quiere Milei es devolverle el federalismo a las provincias y que esa era la razón de las reformas planteadas. 

-Caputo más empoderado que nunca.

-Y... sumale que no estuvo Lule Menem en la reunión.

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-Y me contaron que el "compañero" Ziliotto, de La Pampa, no parecía "compañero" -tiró Ludovico. Acompañamiento absoluto a las reformas... Se ve que cuando va solo, sin Kicillof, el tipo se muestra sensato.

El Dani dejó pasar los segundos para arremeter con un cross a la mandíbula:

-Bueno, después de tanto apretón, lo primero que largó Milei fue un piñazo para los mendocinos. Dijo que el tema de la coparticipación no se va a tocar. O sea: más años de robarnos guita. Es la misma historia de siempre, y todavía hay gente que aplaude.

-Dijo que "no se discute la coparticipación" y agregó que está pendiente desde el '94... Tuviste cuatro gobernadores peronistas que podrían haber insistido y cinco presidentes de tu partido que tampoco lo corrigieron. Pero a vos te hace ruido que lo diga Milei -le devolvió el Omar-.

-Muchachos, insisto: acá lo que importa es la reforma laboral -se metió el Ruso- o "modernización", como le dicen para que suene más simpática. El tema es cómo hacer para que los famosos convenios por empresa que quieren hacer puedan estar por encima de los convenios por actividad. 

-Por ahí le buscan la forma de que sean "complementarios", habrá que ver -largó Ludovico-.

-El tema es que con este reforma, bajándole los impuestos al trabajo, tiene que bajar el costo de contratar a un empleado. Y que después la Justicia no se vuelva loca y funda a las empresas con los juicios laborales, si no nadie va a invertir un mango -cerró el economista del grupete-.

(...)

Los amigos terminaron lo que quedaba de grapa y se despidieron con la promesa de volver a encontrarse en siete días.

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