La Cámara Federal ratificó la decisión del juez Daniel Rafecas y habilitó el primer juicio en ausencia en la causa AMIA. Los acusados iraníes, prófugos desde hace años, son señalados como responsables del atentado.
Se confirmó el juicio en ausencia por el atentado a la AMIA
La Cámara Federal confirmó este martes la realización del juicio en ausencia contra diez acusados por el atentado a la AMIA, ocurrido el 18 de julio de 1994 en Buenos Aires, que dejó 85 víctimas fatales y más de 150 heridos.
La resolución ratifica lo dispuesto en junio por el juez Daniel Rafecas, quien había decidido avanzar con el proceso al amparo de la nueva ley sancionada este año.
Con este fallo, la UFI AMIA deberá presentar el pedido de procesamientos para que Rafecas formalice la acusación contra los prófugos.
Se trata de exfuncionarios del régimen iraní y miembros del grupo libanés Hezbollah, quienes cuentan desde 2006 con pedido de captura internacional y alerta roja de Interpol, aunque nunca fueron detenidos. La mayoría reside en Irán, país que se niega a extraditar a sus ciudadanos.
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La defensa pública de los diez acusados -entre ellos Alí Fallahijan, Alí Akbar Velayati, Mohsen Rezai, Ahmad Vahidi, Hadi Soleimanpour, Mohsen Rabbani, Ahmad Reza Asghari, Salman Raouf Salman, Abdallah Salman y Hussein Mounir Mouzannar- había apelado la decisión de Rafecas, pero la Cámara entendió que los imputados fueron declarados rebeldes hace años y evaden de manera sistemática a la Justicia argentina.
Desde Teherán, el gobierno iraní rechazó en duros términos la medida. A través de Issa Kameli, director general para América del Ministerio de Relaciones Exteriores, acusó a la Argentina de impulsar una "acción ilegal y politizada" en complicidad con Israel y Estados Unidos, y exigió una explicación oficial al presidente Javier Milei.
La causa AMIA acumula tres décadas de investigaciones, con múltiples juicios y más de 470 líneas de pesquisa abiertas. Según la Unidad Fiscal AMIA, de los 145 imputados en estos años, apenas 15 llegaron a juicio oral. Las pericias determinaron que el ataque fue ejecutado con una camioneta Renault Trafic blanca cargada de explosivos.
En 2024, la Corte Interamericana de Derechos Humanos condenó al Estado argentino por fallas en la investigación, lo que reforzó la necesidad de avanzar hacia un juicio oral que, por primera vez, se concretaría sin la presencia de los acusados en el país.
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