Lo hizo mediante un comunicado titulado "Cuestión Malvinas: rechazo argentino a los anuncios presentados por las ilegítimas licenciatarias en las Islas Malvinas". Cómo es el reclamo argentino contra la "Decisión Final de Inversión".
Cancillería rechazó inversiones petroleras en Malvinas
El Gobierno nacional expresó un rechazo contundente a los anuncios realizados por las empresas Rockhopper Exploration (británica) y Navitas Petroleum (israelí), que comunicaron una "Decisión Final de Inversión" para desarrollar el yacimiento Sea Lion, ubicado frente a las Islas Malvinas.
Según la posición oficial, estas acciones son ilegales porque se llevan adelante sin la autorización de la Argentina, autoridad competente sobre la plataforma continental en disputa.
Argentina recordó que cualquier exploración o explotación unilateral de recursos naturales en las áreas bajo disputa vulnera resoluciones centrales de Naciones Unidas, como la 2065 (XX) y otras posteriores.
Estos documentos reconocen que existe una disputa de soberanía entre Argentina y el Reino Unido e instan a ambas partes a retomar negociaciones para alcanzar una solución pacífica.
Cuestión Malvinas: rechazo argentino a los anuncios presentados por las ilegítimas licenciatarias en las Islas MalvinasLa República Argentina expresa su más enérgico rechazo a la pretendida "Decisión Final de Inversión" anunciada por las ilegítimas licenciatarias Rockhopper... pic.twitter.com/1f6kntTMRo
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En ese marco, el Gobierno también extendió su rechazo a todas las medidas vinculadas al proyecto Sea Lion: regulaciones dictadas por las autoridades isleñas, concesiones, contratación de proveedores y cualquier avance hacia la fase productiva de hidrocarburos en la zona.
La Cancillería señaló que estas iniciativas violan la Resolución 31/49 de la ONU, que exige no realizar cambios unilaterales mientras continúe la disputa. Además, recordó que la legislación argentina -en especial las leyes 26.659 y 26.915- prohíbe cualquier actividad hidrocarburífera en la plataforma continental sin autorización oficial.
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Ambas compañías ya fueron sancionadas por operar sin permisos. Rockhopper fue declarada clandestina en 2012 y quedó inhabilitada por 20 años en 2013. En tanto que Navitas recibió sanciones similares en 2022 por realizar tareas de exploración sin autorización.
El Gobierno reiteró que nadie -ni personas, empresas, bancos, aseguradoras o proveedores- tiene habilitación para participar en actividades petroleras en la región sin permiso argentino.
Advirtió que cualquier involucramiento será considerado un acto ilícito, tanto según el derecho internacional como según las leyes nacionales.
Quienes participen, directa o indirectamente, podrán enfrentar sanciones administrativas, inhabilitaciones, acciones judiciales y medidas en tribunales nacionales e internacionales. Argentina dejó en claro que desalienta cualquier tipo de participación en estos proyectos y se reserva la facultad de actuar para impedir su avance.
Por otro lado, el Gobierno calificó el anuncio como un nuevo acto unilateral del Reino Unido, especialmente grave por tratarse de recursos no renovables. Ante esa situación, la Argentina anunció que profundizará su plan de acción y adoptará nuevas medidas para resguardar sus derechos soberanos, siempre en conformidad con el derecho internacional.
Reafirmación de la soberanía
Finalmente, el comunicado remarcó que la Argentina mantiene sus derechos "legítimos e imprescriptibles" sobre las Islas Malvinas, Georgias del Sur, Sandwich del Sur y los espacios marítimos que las rodean. Según el Gobierno, cualquier intento de avanzar en la explotación petrolera sin autorización constituye una violación directa a esos derechos.
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