Un informe de La Nación asegura que Guillermo Francos está "recluido" y a la espera de una charla decisiva con el Presidente que podría sellar su salida.
Francos, cada vez más aislado: crecen las versiones sobre su salida
"El fortalecimiento de (Santiago) Caputo es innegable. Guillermo (Francos) evaluará si se siente cómodo o si prefiere irse a la casa. Es una decisión de vida". Esta cita de un allegado al jefe de Gabinete, publicada por La Nación, sintetiza lo que está pasando en el Gobierno a días de las elecciones.
De acuerdo con una nota del periodista Matías Moreno, Francos espera una reunión con Milei para definir su futuro, aunque las señales dentro del gabinete ya no son alentadoras para el funcionario: la designación de Pablo Quirno como canciller -un hombre del riñón de Luis "Toto" Caputo- fue interpretada como otro movimiento del ala más cerrada del mileísmo, que busca consolidar su dominio tras las elecciones legislativas.
Francos, que viajó a Rosario para acompañar el cierre de campaña nacional, fue testigo directo de ese reordenamiento. En la foto final del acto, los rostros que ocuparon el centro del escenario no dejaron dudas: Karina Milei, Luis Caputo, Santiago Caputo, Sebastián Pareja... y, algo más atrás, el propio jefe de Gabinete.
De acuerdo con la publicación de La Nación, en su entorno admiten que el desgaste es profundo y que Francos se siente cada vez más ajeno a las decisiones del poder. Por eso, nadie descarta que, tras la conversación pendiente con el Presidente, decida dar un paso al costado.
Durante los últimos meses, Francos había sido clave en la reconstrucción del diálogo con Mauricio Macri, incluso participando de las gestiones para reabrir el canal entre ambos líderes. Sin embargo, su estilo conciliador chocó con la lógica del núcleo duro libertario, que responde directamente a Santiago Caputo y a la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei.
A esa tensión con Francos se sumó meses atrás su malestar con Daniel "Gordo Dan" Parisini, hombre de Caputo, luego de sus ataques verbales contra el senador Luis Juez y su hija. Francos fue de los pocos funcionarios en expresar solidaridad con el cordobés, lo que terminó de marcar su distancia con "Las Fuerzas del Cielo".
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Las áreas sensibles del Estado -desde la inteligencia hasta la ex-AFIP- responden al esquema que maneja Caputo, fortalecido tras el apoyo financiero del gobierno de Donald Trump a Milei. Francos, en cambio, quedó marginado de esas negociaciones y del armado que se proyecta para la segunda mitad del mandato.
El posible reemplazo de Francos alimenta rumores sobre una reconfiguración completa del gabinete tras las elecciones. En Balcarce 50 nadie se anima a hacer pronósticos. Algunos piensan que la conversación con Milei podría ofrecerle una salida elegante; otros creen que será el punto final de una convivencia cada vez más incómoda.
Por ahora, Francos mantiene el silencio. En política, a veces eso dice mucho más que cualquier declaración.
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