La Junta de Disciplina del Ministerio de Seguridad resolvió una dura pena, luego de que la investigación confirmara agresiones físicas y amenazas hacia su pareja.
Sancionaron a un policía por un caso de violencia de género
Un policía mendocino fue suspendido por 20 días luego de que la Junta de Disciplina del Ministerio de Seguridad y Justicia confirmara su responsabilidad en un episodio de violencia de género ocurrido en 2021 en el departamento de Godoy Cruz.
El hecho
De acuerdo con lo que surge del sumario, el episodio tuvo lugar durante la madrugada del 18 de septiembre de de ese año, cuando la víctima -pareja del efectivo- se encontraba en el domicilio del uniformado, en un barrio de Godoy Cruz.
El hombre llegó al lugar acompañado por otra mujer, lo que originó una discusión violenta. Según el testimonio de la denunciante, él comenzó a insultarla y empujarla, y en medio del forcejeo la tomó del cabello y le dio un golpe en la cara.
La víctima intentó salir de la casa con su bebé, pero el policía la retuvo e impidió que se marchara. En ese momento, la mujer arrojó objetos para defenderse, y fue entonces cuando el agresor le provocó una fractura en el dedo medio de la mano derecha.
Finalmente, la víctima logró salir a la calle con su hijo y fue auxiliada por una vecina, quien la refugió en su vivienda. Sin embargo, al darse cuenta de que había olvidado la mamadera del bebé, regresó a pedirla. Según su relato, el hombre le permitió ingresar nuevamente, pero una vez dentro la amenazó con quitarle la custodia de su hijo alegando que tenía contactos en la justicia y la coaccionó para mantener relaciones sexuales.
La investigación judicial y administrativa
La mujer realizó la denuncia ante el Ministerio Público Fiscal, lo que dio origen a una causa penal instruida por la Fiscalía de Homicidios y Violencia Institucional.
Los informes médicos del Hospital Central confirmaron la fractura en la mano derecha y las lesiones en la pierna, mientras que el peritaje judicial determinó que las heridas implicaban más de un mes de recuperación y una incapacidad laboral temporal.
Además, el Equipo Profesional Interdisciplinario del Poder Judicial evaluó la situación y consideró que el episodio presentaba un riesgo moderado de violencia física grave, debido al contexto de agresión y al hecho de que el denunciado era un miembro activo de la fuerza policial.
Con la documentación penal remitida, la Inspección General de Seguridad (IGS) inició el sumario administrativo correspondiente. Durante el trámite, el policía decidió no declarar tanto en la informativa como en la indagatoria administrativa., aunque sí cumplió con un curso de concientización sobre violencia de género exigido por la institución.
La resolución
Tras analizar las pruebas y testimonios, la Junta de Disciplina concluyó que el efectivo vulneró el régimen disciplinario policial, previsto en la Ley 6722, y que su conducta resultó incompatible con los valores de la fuerza.
En la resolución se menciona expresamente que se trata de un episodio grave enmarcado en violencia de género, en los términos de la Ley Nacional 26.485 de protección integral a las mujeres.
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Por esa razón, el organismo resolvió aplicar una sanción de 20 días de suspensión de empleo, sujeta a exoneración, es decir, que una reincidencia podría derivar en su expulsión definitiva de la fuerza.
El documento oficial, difundido en el Boletín Oficial de Mendoza, también ordena notificar al agente y registrar la sanción en el Libro de Resoluciones del Ministerio de Seguridad y Justicia.
Texto de la resolución
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